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Líderes griegos acordaron gran parte de las medidas de austeridad
Domingo, Julio 29, 2012 - 17:57

Grecia, que está cerca de la bancarrota, está peleando desesperadamente para convencer a los escépticos prestamistas de la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional (FMI) de que está lista para seguir adelante con sus reformas para sacar a su economía de la recesión.

Atenas. Líderes políticos en Grecia han acordado buena parte de las medidas de austeridad demandadas por sus acreedores y ahora buscan aplicar recortes de salarios y pensiones para identificar los últimos 1.500 millones de euros en ahorros que deben hacer, dijo domingo una fuente cercana a las discusiones.

Grecia debe realizar ahorros equivalentes a 11.500 millones de euros para 2013 y 2014 a fin de satisfacer a sus cada vez más impacientes prestamistas, que actualmente se encuentran de visita en Atenas para evaluar el progreso de país en el cumplimiento de los términos de su último rescate.

Una fuente del Ministerio de Finanzas dijo que los prestamistas, quienes tenían previsto abandonar Atenas a fines de julio, se quedarán ahora hasta que el plan de ahorros sea concretado.

"Queremos ayudar y nos quedaremos por el tiempo que sea necesario y hasta que el plan esté terminado", dijo el jefe de la misión del FMI, Poul Thomsen, al ministro de Finanzas, según un funcionario griego.

La semana pasada, el gobierno del primer ministro Antonis Samaras consiguió identificar una serie de medidas para lograr esos ahorros, pero los tres partidos de su administración no llegaron a aprobarlas y deberán reanudar las negociaciones el lunes.

"Los líderes políticos no tienen desacuerdos en nada, sólo hay propuestas alternativas que están siendo discutidas para proteger a las personas con pensiones o ingresos más bajos en el sector público", dijo la fuente, que está involucrada en las negociaciones.

"Necesitamos medidas por un valor de 1.500 millones de euros para finalizar el paquete de 11.500 millones de euros", indicó.

Grecia, que está cerca de la bancarrota, está peleando desesperadamente para convencer a los escépticos prestamistas de la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional (FMI) de que está lista para seguir adelante con sus reformas para sacar a su economía de la recesión.

Pero los prestamistas hasta el momento parecen mucho menos convencidos y funcionarios han dicho a Reuters que el país posiblemente requerirá una nueva reestructuración de deuda que la zona euro - que afronta turbulencias en los mercados por Italia y España - apenas podría permitirse.

Medios griegos han reportado que los líderes del país están discutiendo posibles despidos de contratistas del sector público, un límite en las pensiones, reducciones de beneficios sociales, recortes a las exenciones de impuestos, menores salarios para empleados estatales y elevar la edad de retiro en un año para compensar por la brecha en la necesidad de ahorro.

Puesto que la decisión de un nuevo tramo de ayuda a Grecia no se espera hasta septiembre, la sombría posición financiera del país ya parece ser cada vez más precaria.

"El hecho de que no hayamos recibido la cuota de ayuda acordada ha puesto presión sobre nuestras reservas de efectivo. Hasta entonces, estamos dando un especial cuidado a nuestro manejo de efectivo", dijo el viceministro de Finanzas griego, Christos Staikouras, al semanario Real News.

Autores

Reuters