"Era hora de un rebote luego de seis días", dijo Bill Dinning, jefe de estrategias de inversión de Aegon Asset Management en Edimburgo.

Londres. Las acciones europeas cerraron con una fuerte subida este jueves, en un rebote tras seis días de pérdidas, porque los inversionistas salieron a la caza de papeles castigados y se enfocaron especialmente en el sector de materias primas.

Wall Street también puso fin a una racha bajista, impulsada por datos de exportaciones que mostraron un récord, lo que ayudó al índice FTSEurofirst 300 de las principales acciones europeas a ganar un 0,9% para cerrar en 1.104,43 puntos, su primera sesión en alza desde el 31 de mayo.

El índice acumula un descenso del 1,5% en lo que va del año.

"Era hora de un rebote luego de seis días", dijo Bill Dinning, jefe de estrategias de inversión de Aegon Asset Management en Edimburgo.

"Si uno miraba el mundo sólo desde el punto de vista de resultados corporativos y balances, uno debía ser muy optimista. Si podemos encontrar alguna manera de que Grecia salga de las primeras planas, entonces el mercado podría subir más", agregó.

Los futuros del crudo estadounidense subían luego de que la decisión de la OPEP de no elevar las metas de producción en una reunión el día previo y una fuerte caída en los inventarios reportada por Estados Unidos avivaban los temores sobre el suministro.

Las acciones de las petroleras Total, ENI y BP subieron entre un 1,2% y un 1,4%.

El cobre recortaba pérdidas, ayudado por expectativas de una mayor demanda de China -uno de los mayores consumidores mundiales del metal- que contrarrestaban datos de empleo en Estados Unidos que apuntaban a una mayor desaceleración de la economía de ese país.

Entre las acciones de compañías mineras que subieron estuvieron las de Anglo American y Antofagasta, que avanzaron un 2,1% y un 2,5%, respectivamente.

El índice STOXX Europe 600 de recursos básicos, que avanzó un 1,91%, sigue siendo el de peor desempeño en el año, con un descenso acumulado de más del 12%.

Entre las noticias de la región, destacaron las decisiones del Banco Central Europeo y del Banco de Inglaterra de mantener las tasas de interés de referencia sin cambios, en 1,25% y 0,5%, respectivamente. El BCE dio señales de que elevará la tasa en julio.

El alza en Wall Street se vio impulsada por una reducción del déficit comercial estadounidense, dato positivo tras una reciente racha de débiles indicadores económicos. Algunos analistas dijeron que este fue un factor importante para el repunte en Europa.

En los mercados locales también hubo subidas. El índice británico FTSE 100 y el francés CAC 40 ganaron un 0,8% y un 1,1%, respectivamente, mientras que el alemán DAX subió un 1,4%.

Las acciones de minoristas estuvieron entre las que sufrieron las mayores pérdidas. Los títulos de Home Retail se desplomaron un 13,7% tras decir que los consumidores han reducido sus compras, generando temores a otro retroceso en el gasto.