El índice de acciones europeas líderes FTSEurofirst 300 bajaba un 2%, tras haber subido durante la sesión por las intervención del Banco Central Europeo (BCE), que intenta evitar una propagación de la crisis de deuda de la zona euro.
Londres. Las acciones mundiales caían este lunes a mínimos de 11 meses por los fuertes temores que provocó una baja de la calificación de la deuda de Estados Unidos, que contrarrestó el alivio por la ayuda del Banco Central Europeo a Italia y España a través de la compra de bonos.
El índice de acciones mundiales bajaba otro 1%, tras una pérdida de valor de unos US$2,5 billones durante la semana pasada.
Wall Street parecía encaminado a ahondar la caída, porque los futuros del índice S&P 500 perdían cerca de un 2,5%.
El índice de acciones europeas líderes FTSEurofirst 300 bajaba un 2%, tras haber subido durante la sesión por las intervención del Banco Central Europeo (BCE), que intenta evitar una propagación de la crisis de deuda de la zona euro.
Los rendimientos de los bonos italianos y españoles cayeron cerca de un punto porcentual y sus diferenciales frente al bono alemán se reducían, lo mismo que el costo de asegurar su deuda frente a un incumplimiento.
Pero el movimiento de los inversores hacia activos seguros impulsaba al oro a un nuevo récord de US$1.700 por onza, mientras que el dólar se debilitaba frente a una cesta de monedas.
Los inversores parecían poco impresionados por una reunión el fin de semana de líderes de las mayores economía del mundo, que tuvo por objetivo salvaguardar un funcionamiento sin contratiempos de los mercados financieros, luego de que la agencia Standard & Poor's bajó la calificación de Estados Unidos a 'AA+' desde 'AAA'.
"No pasará mucho tiempo antes de que otras agencias sigan ese camino, considerando el estado de las finanzas estadounidenses. Una cosa es segura, la volatilidad seguirá y se hará más difícil operar en el mercado", dijo Angus Campbell, jefe de ventas de Capital Spreads.
Moody's repitió el lunes una advertencia de que puede bajar la calificación de Estados Unidos antes del 2013 si el panorama económico se deteriora significativamente, pero ve posibilidades de un nuevo acuerdo en Washington para reducir el déficit fiscal antes de esa fecha.