Cecilia Álvarez, argumentó que aunque la economía está resentida, por el momento no amerita llevarla a cuidados intensivos.

De acuerdo con el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) las exportaciones colombianas han registrado una caída de 31,2% durante el primer semestre de 2015 con respecto al mismo periodo del año anterior. Pese al difícil panorama de las ventas externas, el Gobierno se muestra optimista, argumenta que el precio del dólar, que bordea los $3.000, permitirá que los envíos de productos no tradicionales remplacen la renta petrolera que se perdió por los menores precios del crudo.

Sin embargo, los representantes de algunos de los gremios más importantes del país, como la Asociación Nacional de Comercio Exterior (Analdex) y la Asociación Nacional de Empresarios (ANDI) en diálogo con El Espectador han advertido que el dólar caro no es suficiente para reactivar las exportaciones debido a que el país lleva varios años experimentando una enfermedad holandesa. Este sería el fenómeno que habría deteriorado durante más de una década a sectores como el industrial y el agropecuario, dificultando su nueva misión de sacar adelante el comercio exterior colombiano.

La ministra de Comercio, Indutria y Turismo, Cecilia Álvarez-Correa, habló con este diario y afirmó que, aunque la economía está resentida, por el momento tiene un simple resfriado holandés y no amerita llevarla a cuidados intensivos.

-¿Considera que Colombia, como dicen algunos analistas, está en medio de una “enfermedad holandesa”?

-Como lo ha dicho el presidente Santos, estamos viviendo un resfriado holandés. Nuestra economía enfrenta grandes retos. Después de cinco años de bonanza de precios de bienes básicos, principalmente petróleo, enfrentamos la desaceleración de la economía mundial.

Para enfrentar esta coyuntura, tenemos a favor la fortaleza de nuestra economía. El año pasado, con 4.6% de crecimiento, fuimos primeros en la región. Este año creceremos muy por encima del promedio regional y nuestras exportaciones no minero-energéticas han registrado crecimiento intermensual entre enero y junio.

-¿Cuál es su pronóstico de crecimiento de la industria para este año y 2016?

-Las proyecciones de los analistas privados indican que este año tendremos un crecimiento de la industria del orden de 2%. Para el 2016 prevén que será un 3,6%, por encima del 3,3% que estiman crecerá el PIB total. La industria será el motor del crecimiento, por supuesto hay una coyuntura difícil enmarcada en una desaceleración de la economía mundial, en la caída de los precios de los commodities y en la situación compleja de nuestros vecinos, pero es justamente de las crisis de donde surgen las transformaciones más sorprendentes.

-¿La Reforma Tributaria que se hizo en 2014 perjudicó a los industriales del país?

-La industria es muy sensible a ajustes tributarios, pero también entiende que fue una medida necesaria para salvaguardar la estabilidad macroeconómica del país, la cual es un pilar fundamental de la agenda de competitividad.

El Gobierno nacional convocó una Comisión de Expertos independientes que entregará sus recomendaciones en noviembre. Con base en esos fundamentos técnicos, se tomarán decisiones que le apunten a la competitividad industrial relacionadas con los temas tributarios.

-¿Los mecanismos de la política industrial que usted lanzó en 2014 han sido efectivos, es decir, si han reducido los problemas de competitividad del país y los problemas arancelarios?

-La política industrial tiene un gran propósito: ayudar a los empresarios a superar las barreras que afectan su competitividad y su productividad. Esto, apoyando la innovación como motor para lograr la transformación productiva, no con proteccionismo que retrasa el desarrollo.

Los empresarios nos han pedido acceso a recursos: por medio de Bancoldex les ofrecemos recursos por $900.000 millones para apoyar su actividad empresarial. Los empresarios nos piden apoyo para innovar: lo hacemos por medio de las convocatorias de Innpulsa que ya están abiertas. Los empresarios nos piden estímulos para innovar: los apoyamos con un incentivo para que los empresarios que inviertan en innovación, descuenten de su impuesto de renta hasta $175 por cada $100 invertidos. Los empresarios pidieron agilizar los trámites de exportación: retomamos la administración de las zonas francas y expedimos un decreto que agiliza la declaratoria de las mismas de 18 a 6 meses.

-¿Colombia va a lograr aprovechar la apreciación de la tasa de cambio?

-La devaluación de las monedas frente al dólar no es un fenómeno exclusivamente colombiano. Es como si, en una carrera de atletismo, nos hubieran dado una ventaja en la largada de la carrera, pero no solo a nosotros sino a todos los competidores. Por otra parte, la devaluación afecta la competitividad de bienes con alto componente importado.

-¿Cuál es nuestra ventaja en esta coyuntura?

-Los acuerdos comerciales con economías como las de Estados Unidos y Europa, que no tienen otros países de la región, y en cuyo aprovechamiento trabajamos desde mucho antes de la actual coyuntura cambiaria. Las perspectivas de los empresarios son positivas y Analdex, por ejemplo, espera un repunte de las exportaciones para el segundo semestre.

-¿Le preocupa la reducción, todavía escasa, de las importaciones?

-Las cadenas globales de valor hacen que cualquier economía que quiera exportar, deba importar. Lo que no debe importar un país es aquello que se produce internamente o que puede producirse. Para lograrlo, trabajamos en identificar productos importados susceptibles de ser producidos en el país, los proveedores potenciales y las empresas importadoras, para conectarlos y promover encadenamientos productivos.

Ese es el eje de nuestra estrategia de encadenamientos productivos, que tiene como propósito lograr que las grandes compañías sean jalonadoras de la pequeña y mediana industria. En éste eje, hemos identificado 1.000 productos importados susceptibles de ser producidos en el país. Trabajamos en conectar las empresas importadoras con los potenciales proveedores colombianos que podrían desarrollar estos productos. A su vez, se han identificado oportunidades para que las mayores empresas importadoras del país aprovechen la actual apreciación del dólar para abastecerse en el mercado nacional.

Nuestro llamado para los consumidores en Colombia: compra colombiano, cambiemos la historia.

-¿Considera que son los TLC la medida más efectiva para el desarrollo económico e industrial de Colombia?

-¿La medida más efectiva? No. ¿Una medida indispensable para lograrlo? Sí.

-¿Qué opina de la propuesta de la ANDI de dividir su ministerio en dos, uno que se dedique a los temas de industria y otra a los de comercio exterior?

-Con ese tipo de afirmaciones se plantea un maniqueísmo inexistente. Por el contrario: la industria se beneficia cuando el esfuerzo comercial se dirige a buscarle oportunidades en el mercado mundial y a apoyar su inserción en cadenas globales de valor. Así es: la política comercial y la política industrial son complementarias. Y ambas son fundamentales para el desarrollo productivo.

De la meta de los US$30.000 millones para las exportaciones no minero-energéticas, hasta el 2018, ¿cuánto se ha avanzado en el primer semestre de 2015 y cuánto espera para 2016?

Dentro de esa meta, para el 2015 debemos llegar a US$24.942 millones y para el 2016 esperamos llegar a US$26.525 millones de exportaciones de bienes y servicios no minero – energéticos. Las más recientes cifras para servicios son a marzo y llegan a los US$1.740 millones, para el caso de bienes no minero – energéticos están a mayo y alcanzan los US$6.376 millones, esto nos da un avance de US$8.116 millones.

No será una tarea fácil, pero con todas las medidas que estamos adoptando para derribar barreras, con la profundización y aprovechamiento de los acuerdos, con la estrategia Colombia Exporta Servicios y con los empresarios, la vamos a alcanzar.

De los US$6.000 millones en ingresos que debe generar el turismo hasta el 2018, ¿qué tanto se ha avanzado en 2015?

Dentro de esa meta, fijamos US$5.229 millones para el 2015. Lo cumpliremos ampliamente. Al primer trimestre generamos divisas provenientes del turismo por US$1.450,8 millones, esto es 19% más que el mismo periodo del año anterior, la cifra más alta que hayamos alcanzado en este periodo y hace del turismo el segundo generador de divisas del país.

-¿Cuántos créditos ha desembolsado Bancoldex en lo corrido del año para programas de desarrollo empresarial?

-Entre enero y junio de 2015, Bancoldex ha desembolsado $1,61 billones a 39.286 empresas, de estos recursos $620.000 millones han sido destinados a financiar procesos de modernización en 11.582 empresas y $400.000 millones para capital de trabajo beneficiando a 27.476 empresas. Para comercio exterior a junio de 2015, Bancoldex financió $550.000 millones.

-¿Cuántas nuevas empresas están exportando hoy y qué garantiza que lo hagan permanentemente?

Entre 2010 y 2014, de acuerdo con el DANE, se han identificado 6.373 empresas que iniciaron procesos de exportación, por montos superiores a los US$10.000 que no registraron ventas a mercados externos entre 2006 – 2009.

-¿Cuáles son las propuestas para estabilizar la balanza comercial con Estados Unidos, que es deficitaria para Colombia, generando afectaciones para el sector agrícola y agroindustrial?

A pesar de esa situación, desde 2012 las exportaciones de bienes no asociados a la minería y el petróleo han presentado un comportamiento progresivamente positivo, registrando un crecimiento de 6% en comparación con los dos años previos a la puesta en vigencia del Acuerdo. Puntualmente en 2014, año en el que se presentó una coyuntura particularmente compleja, nuestras ventas de bienes no minero-energéticos crecieron 11%.

Elaboramos el Mapa Regional de Oportunidades, mediante el cual se identifican los productos con mayor potencial de exportación de cada uno de los departamentos del país. Es resultado del trabajo conjunto de todas las entidades del sector comercio y del diálogo directo con industriales, cámaras de comercio, gremios y academia.

Teniendo claro este panorama de oportunidades y dificultades, desarrollamos un trabajo interinstitucional en el que participan ProColombia, Bancoldex, el Invima, el ICA, entre otros, para asegurar que las empresas modernicen su aparato productivo, mejoren su productividad, se preparen y cumplan con los requisitos para ingresar a mercados internacionales y posicionen sus productos en nuevos mercados.