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Monedas de A.Latina seguirán débiles al corto plazo ante dudas por crisis financiera global
Lunes, Septiembre 26, 2011 - 17:40

En este escenario, tanto el real como el peso mexicano y chileno alcanzaron sus valores más bajos en más de un año, sin miras a que la situación pueda revertirse esta semana, lo que podría incentivar más medidas de algunos gobiernos.

Montevideo. Las monedas latinoamericanas seguirían débiles en los próximos días, expuestas a la incertidumbre que genera la crisis en Europa y los temores a una recesión global, lo que ha fortalecido al dólar como moneda de refugio.

En este escenario, tanto el real como el peso mexicano  y chileno alcanzaron sus valores más bajos en más de un año, sin miras a que la situación pueda revertirse esta semana, lo que podría incentivar más medidas de algunos gobiernos.

Otras monedas como el sol peruano, el peso argentino y el uruguayo han sido objeto de intervención de sus respectivos bancos centrales para evitar vaivenes abruptos.

La fuerte aversión al riesgo de los inversores ha ayudado al dólar, puesto que la divisa ha operado como resguardo de sus activos.

"Al no haber un relajamiento cuantitativo agresivo por parte de la FED, eso juega a favor de que la depreciación de las monedas continúe", dijo el economista Aldo Lema de Vixion Consultores en Chile.

La Reserva Federal anunció días atrás un plan de acción para reducir las tasas de interés de largo plazo, estrategia que no tuvo eco en el mercado y fue percibida como débil para fortalecer a la devenida economía estadounidense.

Por su parte, los países miembros del Fondo Monetario Internacional (FMI), que finalizaron este domingo su asamblea bianual en Washington, presionaron a sus socios europeos en busca de mayores sacrificios respecto a la crisis de deuda de Grecia.

Entre los reclamos, se le exigió al Banco Central Europeo (BCE) un mayor compromiso para combatir la crisis, puesto que los problemas soberanos y financieros de los países miembros de la zona euro tienen en jaque a la economía mundial.

Monedas a la baja. El real acumula una depreciación de un 15% en lo que va de septiembre, habiendo alcanzado en los últimos días su nivel más bajo desde el 2009, lo que motivó la intervención del Banco Central con una venta de US$2.750 millones en swaps cambiarios para contener la caída.

El viernes, registró su segunda alza diaria en septiembre al fortalecerse un 3,19%, cotizando a 1,8360 puntos en el mercado interbancario, luego de depreciarse un 2% el jueves.

El jefe de la correduría Gradual Investimentos, André Prefeito, alertó que el movimiento pudo haber sido solo un ajuste a corto plazo antes de más turbulencias a comienzos de esta semana.

Los operadores son optimistas respecto a que el Gobierno brasileño retire un impuesto del 1% sobre algunas operaciones con derivados cambiarios, adoptado cuando el real cotizaba en sus máximos niveles desde 1999.

El peso chileno cayó con fuerza la semana pasada, arrastrado por el desplome del cobre, la principal exportación del país, y pese a que se recuperó por una toma de ganancias que elevó transitoriamente la oferta local en dólares, mantendría el sesgo bajista.

"El panorama sigue siendo la teoría del caos. La presión es bajista para el peso, con un nivel de resistencia técnico en las 530 unidades por dólar. Si lo rompe, puede buscar tranquilamente las 550 unidades", dijo Benjamín Sierra, subgerente de estudios de Scotiabank Fondos Mutuos en Chile.

El sol peruano, como las demás monedas de la región, seguiría respondiendo al ánimo de los mercados internacionales respecto a los acontecimientos, especialmente de Europa, opinó Gonzalo Navarro, gerente de cambios del Banco Santander en Lima.

"Mientras continúe el desánimo y las expectativas por una recesión mundial, las presiones de compra de extranjeros continuarían", agregó.

Por su parte, el peso argentino mayorista retrocedió el viernes un 0,12% a 4,2025/4,205 por dólar, pese a una fuerte intervención de su Banco Central, que vendió de sus reservas unos US$1.250 millones en lo que va del mes.

En tanto, la moneda cotizada en el mercado marginal, donde no opera el Banco Central, cerró en su mínimo histórico de 4,48/4,485 unidades.

"El Banco Central dispone de la cuantiosa aunque menguante artillería de las reservas y el saldo comercial se mantiene positivo. Esto significa que, en el corto plazo, la autoridad monetaria tiene el control de la situación, aunque sea al costo de vender dólares a futuro a un precio al que no podrá recomprar", dijo la consultora Finsoport.

El peso uruguayo revirtió su tendencia alcista la última semana, volviendo a su valor mínimo en 11 meses, arrastrado por la depreciación del real. La cotización fue de 20,25 pesos por dólar el viernes, retrocediendo un 0,98% en lo que va del año.

Autores

Reuters