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Moody’s advierte: situación fiscal de México es favorable pero delicada
Martes, Septiembre 18, 2018 - 13:08

“El mensaje del equipo económico de López Obrador es bastante ambicioso y nuestro tema central es que efectivamente no se resientan las finanzas públicas con su proyecto de reacomodo de gasto”, consignó.

La situación fiscal de México es favorable, pero delicada, pues no hay mucho margen para seguir recargándose en los ingresos fiscales ni para reacomodar los recursos para fondear los programas sociales que planea echar a andar el próximo gobierno, indicó el analista soberano de Moody’s, Jaime Reusche.

“El mensaje del equipo económico de Andrés Manuel López Obrador es bastante ambicioso y nuestro tema central es que efectivamente no se resientan las finanzas públicas con su proyecto de reacomodo de gasto”, consignó.

Entrevistado por El Economista, detalló que si el nuevo gobierno no logra la recomposición del gasto y lo aumenta, se pondrá en juego la estabilidad de la deuda, que en efecto está recibiendo.

“El espacio fiscal es bastante limitado pues se cuenta con un equilibrio frágil que se debe cuidar”, aseveró.

El analista de Moody’s la agencia que tiene a México con la más alta nota, “A3” con perspectiva Estable, encuentra un riesgo adicional sobre el manejo del gasto federal de la próxima administración: “la poca experiencia a nivel macro que tienen los funcionarios propuestos por el presidente electo para dirigir las finanzas nacionales”.

“No encontramos mucha gente con experiencia de gobierno a nivel federal. Hay mucha gente con experiencia a nivel Ciudad de México, pero la pregunta es qué tanto se puede traducir esa destreza local en el ámbito nacional”.

Recuerda que Enrique Peña Nieto reconoció en vísperas de su Sexto Informe de Gobierno que “él asumió sencillamente que podría traducir su experiencia de gobernador a su nueva responsabilidad como presidente del país. Y que en ese trayecto encontró importantes complicaciones”.

“Nuestro escenario en marzo, cuando se cambió a Estable la perspectiva de calificación de México, se contemplaba una estabilización de la deuda, la mejora en las finanzas públicas, y una renegociación favorable del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), así como el hecho de que la transición del nuevo gobierno iba a ser ordenada”.

Por el momento todos esos criterios se están cumpliendo, sostuvo. Por ello considera que se puede esperar que la calificación de México seguirá en “A3”, al menos de aquí al transcurso del 2019.

Los gastos de Pemex

—¿Qué papel jugará el sector energético para las finanzas públicas con la llegada de AMLO?

Tenemos que ver qué tanto se revertirán las medidas de estímulo a la inversión extranjera. Por ahora no hay nada en papel, una hoja de ruta escrita sobre los planes de acción en el sector y en Petróleos Mexicanos (Pemex) en particular. Lo que han dicho funcionarios del equipo económico, es que planean apoyar a la petrolera para que crezca y pueda invertir más. La pregunta que aún tenemos es: ¿de dónde vendrían los recursos? Porque invertir en refinerías, exploración y mayor producción claramente es un tema que requiere mucho dinero y por el momento no hemos definido de dónde saldrán los recursos.

—¿Los recursos que planean reorientar a reducir gasto corriente y suntuoso son suficientes para apoyar a Pemex sin afectar a las finanzas públicas?

Eso nuevamente se ve con mucha curiosidad. El punto es que hay muchos otros proyectos que, han dicho, se fondearán con este reordenamiento presupuestal. Lo que es claro es que si los recursos para apuntalar a Pemex vienen de las cuentas fiscales del gobierno federal, ahí sí podríamos ver un gasto que no estaría contemplado en nuestro escenario base que podría llevar a un descalce de las cuentas fiscales.

—¿Esta curiosidad sobre la forma en que apoyará el nuevo gobierno a Pemex podría poner en riesgo la calificación de México?

Seguiremos observando. La verdad el cambio del partido en el poder es muy importante, pues veníamos de un tradición de partido con ideas explícitas o claras,  que permitía saber dónde y cómo dirigirían sus políticas públicas, y hoy tenemos más preguntas, cuya respuesta no se resolverá en el corto plazo. Muy probablemente será hasta el 2019 cuando tendremos más claridad.

—¿Podrían adelantar una revisión a la calificación o perspectiva entrado el 2019 si las señales del manejo de finanzas públicas cambian radicalmente?

Estaremos en modo de observación, estudiando muy de cerca todo, los desarrollos en la parte energética y fiscal, lo mismo que en la parte económica. A toda autoridad hay que darle el beneficio de la duda, y dejarlos ejercer sus políticas y entender el impacto que tendrán sobre finanzas las públicas. Y así nos mantendremos hasta bien entrado el 2019, mientras encontramos algo que nos otorgue muy buenas indicaciones, o que nos preocupe.

—¿Qué pasa si no se logra sumar a Canadá al acuerdo del TLCAN?

Creemos que seguirá incluso si Canadá no se añade. Pero mantenemos el escenario base de que sí se sumará. Pero si no se consigue, el presidente Trump ha dicho que estaría dispuesto a salirse del TLCAN y tomará la base del nuevo acuerdo como un nuevo bilateral con México. Hay otro factor a tomar en cuenta:  la composición del nuevo Congreso de Estados Unidos, que en noviembre será renovado. Ahí tendremos mayores elementos para ver si es factible aprobar un nuevo acuerdo y en realidad la idea de que nos podamos mover adelante con el TLCAN. Sea como se llame. Ya está contemplado con nuestro escenario base que habrá renegociación con una conclusión favorable.

Autores

El Economista (México)