Nuevos decretos del gobierno cubano -vigentes desde hoy- estimulan y facilitan el trabajo privado en alquiler de viviendas, de vehículos y en el transporte en general, las medidas son parte de las reformas introducidas por el presidente Raúl Castro en 2008 para "actualizar el socialismo".

La Habana. En ese año, Raúl Castro anunció cambios que incluían la apertura de 178 modalidades de oficios por cuenta propia Nuevas medidas aprobadas por el Consejo de Ministros en mayo último, aumentaron a 181 las labores que pueden ejercer los cuentapropistas: se aprobaron licencias para vendedores ambulantes de productos agrícolas, entre otras.

Ahora, la Gaceta Oficial publicó en su edición digital de hoy los nuevos decretos, recogidos por la agencia noticiosa ANSA. Uno perfecciona los códigos de derechos y deberes jurídicos de los propietarios que arrienden sus viviendas o habitaciones a cubanos o extranjeros.

Los arrendadores pueden suspender su actividad para arreglos en los inmuebles por un período de tres a seis meses durante los cuales no tendrá que pagar impuestos. Se facilitan también los trámites para comenzar a arrendar y se ajustan los impuestos a favor de los propietarios.

El nuevo reglamento advierte que en el caso de personas que emigran del país o fallecen siendo coarrendadores, "si el otro copropietario lo solicita, se modifica la titularidad del arrendamiento", derogando acciones oficiales anteriores que cancelaban en esos casos las licencias.

Las autoridades también podrán aplicar multas, cancelar licencias e incluso confiscar las viviendas a causa de una serie de hechos que consideran como contravenciones más o menos graves.

Entre estos están los incumplimientos fiscales, la falta de pagos de créditos bancarios, o si los inspectores "detectan" que el propietario es "integrante de misiones diplomáticas, consulares, organismos internacionales o de agencias de prensa acreditadas en Cuba".

Los nuevos decretos también alientan una expansión del derecho de los propietarios de vehículos, tanto de carga como de alquiler para pasajeros, a explotarlos como "cuentapropistas".

Un artículo de la nueva regulación al respecto dice que los poseedores de licencias "pueden prestar servicios a entidades estatales cuyo servicio será pagado dentro de los límites financieros que se establezcan".

Con anterioridad el uso de servicios privados en empresas estatales estuvo sumamente restringido.

Otra autorización de interés es la que garantiza a los privados, en el sector de transporte, contratar la cantidad de trabajadores que estimen conveniente, pagando los tributos correspondientes, tal como sucede en otras modalidades privadas.