Pedro Passos Coelho dijo que si el país necesitara una financiación de emergencia para cumplir con pagos financieros a corto plazo, el gobierno socialista en funciones tendrá la autoridad necesaria para buscar el préstamo hasta que se celebren elecciones anticipadas.
Lisboa. El líder del Partido Social Demócrata (PSD) de Portugal dijo el sábado que está plenamente comprometido para cumplir los objetivos presupuestarios acordados con Bruselas y espera que el país no tenga que pedir un rescate.
Pedro Passos Coelho dijo que si el país necesitara una financiación de emergencia para cumplir con pagos financieros a corto plazo, el gobierno socialista en funciones tendrá la autoridad necesaria para buscar el préstamo hasta que se celebren elecciones anticipadas.
"Creo que debemos evitar una situación semejante", declaró Passos Coelho en referencia a un rescate.
No obstante, añadió que si hay una "situación de emergencia y existe la necesidad de una préstamo de emergencia para evitar una situación de suspensión de pagos portuguesa" hasta las elecciones anticipadas previstas en junio, el gobierno interino tiene la autoridad de buscar uno.
Portugal se vio sumido en una crisis política esta semana cuando el gobierno socialista minoritario dimitió después de que el partido de Passos Coelho y otras formaciones rechazaran unas medidas de austeridad en el Parlamento. Los socialistas continuarán en el gobierno en funciones de momento.
Existen preocupaciones en los mercados financieros de que el limbo político que continuará hasta las elecciones haría difícil para Portugal financiarse en los mercados de deuda, especialmente puesto que tiene que cumplir un vencimiento de bonos en abril de 4.500 millones de euros (US$6.300 millones).
"No creo que nadie en Portugal, o Europa, deje que Portugal suspenda pagos porque vamos a celebrar elecciones", dijo. "Claramente no", indicó.
El diferencial de los bonos portugueses ha aumentado desde que surgió la crisis y dos agencias de calificación rebajaron el rating del país por la incertidumbre creada por la dimisión del gobierno.
La crisis provocó que muchos economistas predijeran que Portugal necesite pronto un rescate como Grecia e Irlanda.
