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Pronostican que inversión local será clave para el crecimiento panameño
Martes, Enero 29, 2013 - 13:55

Cifras tomadas del pronóstico de crecimiento de los sectores económicos, inversión y empleo de la firma Panamá Economy Insight, destacan que entre 2011 y 2016 las inversiones del sector privado alcanzarán los US$26.175 millones en el país.

En el último quinquenio, Panamá registró crecimientos anuales promedio del 8%, consolidándose como una de las economías más estables del mundo y un puerto seguro para las inversiones extranjeras.

Pero antes de registrarse ese “boom” económico, el sector privado de capital local ya apostaba por generar mayor desarrollo. En pocas palabras, la inyección económica de las empresas panameñas es determinante para el crecimiento de un país, que, según su gobierno, registra pleno empleo.

El empresario Stanley Motta considera que existe “una relación indivisible” entre desarrollo económico y actividad privada. “Yo creo que el crecimiento económico es por la inversión que hacemos todos, empresas extranjeras y nacionales, obviamente la nacional no siempre se registra de la misma manera porque para crecer lo hacen con las ganancias retenidas”, afirma el hombre que lidera Grupo Motta, uno de los conglomerados más importantes del país.

A su criterio, si la economía marcha bien, las empresas crecen, pagan más impuestos, generan más empleos e invierten más, pero para dar ese aporte también requieren de espacios e incentivos especiales.

Cifras tomadas del pronóstico de crecimiento de los sectores económicos, inversión y empleo de la firma Panamá Economy Insight, destacan que entre 2011 y 2016 las inversiones del sector privado alcanzarán los US$26.175 millones en el país. De ese monto, US$4.544 millones corresponderán a inversión residencial o proyectos que serán ejecutados entre 2010-2014. El informe no especifica, sin embargo, cuánto de ese capital provendrá de empresas locales.

El ministro de Comercio e Industria, Ricardo Quijano, coincide en que gracias a las mejoras en el clima para hacer negocios, el país no solo atrajo más inversión extranjera —unos US$12.800 millones entre 2006 y 2011, según la Contraloría de la República—, sino también favoreció la creación de nuevas empresas locales.

Quijano explica que solo entre 2009 y 2012 se registraron 99.034 avisos de operaciones de negocios que generaron 380.000 empleos. Si bien no aclara si todas son de capital local, el funcionario considera que en general el sector privado pasa por el mejor momento de su historia.

De hecho, el Centro Nacional de Competitividad reporta la existencia de unas 275.000 mipymes a escala nacional, que generan cerca de medio millón de trabajos y acumulan a su vez millonarias inversiones.

Voces expertas El universo de empresas de capital local en Panamá es tan variado como dinámico, y va desde micro, medianas y pequeñas compañías, hasta cadenas de supermercados, bancos y reexportadoras que operan desde la Zona Libre de Colón.

En la lista destacan, entre otros, nombres como los de Copa Airlines, Grupo Melo, Banco General, Internacional de Seguros, Farmacias Arrocha, ASSA Compañía de Seguros, Global Bank y El Machetazo.

A ellas se suman Ricardo Pérez S. A., distribuidor exclusivo de la marca Toyota; Grupo Rey, especializado en supermercados; Franquicias Panameñas y la exclusiva tienda por departamentos Félix B. Maduro.

En la última década, otras marcas panameñas de gran renombre pasaron a manos extranjeras, tras ser vendidas principalmente a inversionistas latinoamericanos.

Motta sostiene que la empresa privada panameña se cotiza bien en los mercados internacionales porque cada vez se profesionaliza y tecnifica para competir, lo que también le ha permitido crecer más de lo esperado en un contexto mundial turbulento.

Si bien el grupo que él representa es uno de los conglomerados panameños con más presencia en los mercados regionales, a través de marcas como Motta Internacional, Aseguradora ASSA y Banco General, ha sido otro grupo, por medio de su firma estrella, Copa Airlines, la que más se ha internacionalizado.

La aerolínea conecta con 63 destinos en 29 países del Caribe, Norte, Centro y Suramérica, lo que la convierte en una de las cuatro aerolíneas más grandes de Latinoamérica.

El presidente ejecutivo de la empresa, Pedro Heilbron, asevera que Copa no solo es la compañía más grande del país en términos de empleos, con casi 8.000 colaboradores, sino la que genera los volúmenes de negocios más altos ya que impacta desde el turismo hasta las inversiones extranjeras.

“Con Copa hay una mayor cantidad de ciudades que están conectadas con Panamá, eso genera mayor intercambio comercial, y al ser una economía de servicios y un centro logístico internacional, de negocios y compra, el país depende del desarrollo de la aviación para expandirse”, asegura.

En 2010, la firma anunció que invertiría US$2.600 millones en la compra de 22 aviones Boeing y asumió el compromiso de adquirir 10 unidades más que recibiría entre 2015 y 2018.

Sin perder el ritmo, durante este año, la compañía invirtió más de US$300 millones en rubros como la adquisición de tecnología, y se prevé que en el próximo quinquenio desembolse una cifra similar cada año.

Ese fuerte impacto de las empresas locales en la economía es lo que hace creer al vicepresidente ejecutivo de la empresa SOHO Developers Inc., Roberto Fasquelle, que Panamá experimenta un crecimiento originado en parte por su propia gente.

Fasquelle encabeza el desarrollo del complejo de usos múltiples SOHO, valorado en US$360 millones, y será uno de los pocos en el país en contar con certificación “Leed”.

El proyecto financiado por la banca local fue lanzado por el panameño Grupo Wisa, especializado en el segmento de tiendas libres y que por primera vez ingresa al mercado de los bienes raíces de la mano de SOHO Developers Inc., y Westline Enterprises Inc.

“Veo que (el dinamismo) primero vino desde adentro, impulsado por las inversiones locales” y por megaproyectos como la expansión del Canal, para luego captar la atención del mundo, afirma.

A su juicio, “antes de que cualquiera creyera en Panamá, los panameños creyeron en su país”, lo que queda demostrado con el hecho de, que pese a la crisis en las economías desarrolladas, las empresas de capital local han seguido apostando por el país.

Construcción dinámica. Hace una década, cuando la economía panameña comenzó a despuntar, fue la construcción, con cientos de proyectos de altura que cambiaron la fisonomía de la capital, la que mostró de forma visual que algo histórico pasaba en el país.

El presidente de la Cámara Panameña de la Construcción (CAPAC), Gastón Regis, dice que el ramo acapara millones en capital extranjero, pero considera “que la empresa privada panameña es la que mantiene una inversión promedio en los últimos 10 años, arriba de los US$1.200 millones”.

“Este año (2012) estamos en US$1.400 millones”, afirma Regis, para quien la empresa de capital local está determinada a mantener sus inversiones porque existe confianza en el mercado.

Definitivamente una buena noticia para el país, puesto que el referido rubro aporta entre 7% y 8% del Producto Interno Bruto y genera cerca de 176.000 empleos anuales.

De esos, cerca de 161.000 perciben salarios por encima del mínimo establecido por ley con un promedio mensual de US$650, lo que representa unos US$90 millones en salarios directos por mes.

El empresario señala que la construcción y la industria inmobiliaria son, sin duda, dos de los sectores más dinámicos de la economía panameña, pese a las caídas que tuvo la industria debido al sensible descenso experimentado por el segmento de viviendas de alto poder adquisitivo.

El administrador de la Autoridad de Turismo de Panamá (ATP), Salomón Shama, dice que si bien muchos proyectos inmobiliarios están enfocados en los servicios logísticos o en el comercio, el ramo también beneficia al turismo ya que los hoteles sirven para atraer empresas y ejecutivos extranjeros.

Según la autoridad, solo el año pasado, se sumaron en el mercado local 1.800 habitaciones nuevas, distribuidas en proyectos que representaron unos US$400 millones en inversiones.

Si bien, en la lista predominan decenas de pequeños hoteles en el interior del territorio, también se incluyen algunos de marcas globales como Hard Rock Hotel Panamá Megápolis, de capital extranjero valorado en más de US$200 millones, y el Hotel Westin Playa Bonita, construido por la panameña Empresas Bern a un costo de US$100 millones.

Shama aclara que “generalmente la inversión grande que se hace viene de manos panameñas” o de alianzas entre locales y extranjeros.

Retos y financiamiento. Para el secretario general de la Superintendencia de Bancos de Panamá (SBP), Amauri Castillo, el buen desempeño del sector privado es una consecuencia lógica del crecimiento económico, que ha redundado también en una dinamización de los servicios financieros.

“Al crecer las empresas, aumenta el crédito en todos los rumbos, pero tengo que decir que sectores como el comercio, las empresas de la Zona Libre de Colón, el turismo y la construcción muestran señales de mayor dinamismo al momento de acceder a financiamiento”, afirma Castillo.

Al cierre del tercer trimestre, el crédito interno al sector privado registró un saldo de US$31.354 millones, un aumento del 14,3% con respecto al mismo período del año pasado. En ese impulso destacan las carteras de comercio con US$1.895 millones, las hipotecas (US$1.145 millones), el consumo (US$556 millones) y la construcción (US$281 millones).

Sumado a eso, en los últimos años las empresas, tanto nacionales como extranjeras, han optado por buscar recursos en el mercado de valores, tal como lo indican informes de la Bolsa de Valores de Panamá.

De hecho, al cierre del tercer trimestre de 2012, el mercado total negociado alcanzó los US$4.238 millones. De dicho monto, US$3.381 millones correspondieron al mercado primario y solo US$857 millones al secundario.

Motta asegura que en Panamá “ninguna empresa bien administrada tiene problemas para encontrar financiamiento”, dado que el mercado tiene la suficiente liquidez para atender las necesidades del sector privado.

Sin embargo, a pesar de ese entorno favorable, las autoridades y el sector privado reconocen que todavía hay retos importantes que afrontar.

Las empresas locales y extranjeras ven, por ejemplo, con preocupación las dificultades para encontrar personal técnico capacitado. El aumento en los costos operativos por la subida de la inflación, cercana al 6%, y las fluctuaciones en el precio de los hidrocarburos son otros de los problemas que reportan los empresarios.

El director de Estudios Económicos de la Cámara de Comercio e Industrias de Panamá, Manuel Ferreira, sostiene que luchar contra la inflación se ha vuelto un gran problema sobre todo para las pymes, mientras que la falta de técnicos afecta la productividad y aumenta la movilidad de los empleados.

Según la Encuesta de Escasez de Talento 2012 realizada por Manpower, en Panamá el 47% de los empleadores tiene dificultad para contratar personal idóneo para sus empresas.

Con todo y eso, las referidas dificultades no arrugan la voluntad panameña. Con la certidumbre de su ambiente económico, las autoridades y el sector empresarial buscan hacer frente a los retos y dar un nuevo impulso a un país que ya de por sí transita por un camino favorable.

Autores

ElEconomista.net