La Alianza del Pacífico es el proceso de integración más reciente de América Latina, y el Gobierno español subraya que está demostrando su dinamismo en resultados concretos y en capacidad de atracción.
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, participará el próximo jueves en Cali (Colombia) en la VII cumbre de la Alianza del Pacífico, la primera con presencia de los países que, como España, tienen en este foro la condición de observadores y en la que buscará vías de acceso a los mercados asiáticos.
El Ejecutivo español ha estado muy interesado en participar en esta Alianza (que tiene como miembros natos a México, Colombia, Perú y Chile) y en la pasada cumbre iberoamericana se oficializó la condición de España como observadora, convirtiéndose en el único país de Europa con ese estatus.
Los otros países observadores son Panamá, Costa Rica (ambos aspiran a ser miembros natos), Japón, Australia, Nueva Zelanda, Canadá, Guatemala y Uruguay,
Rajoy tendrá oportunidad de conversar con los presidentes de los cuatro países que conforman la Alianza (el colombiano Juan Manuel Santos, el chileno Sebastián Piñera, el mexicano Enrique Peña y el peruano Ollanta Humala) y con los de los países observadores que han confirmado su asistencia.
En concreto, en la cita de Cali estarán presentes también la presidenta costarricense, Laura Chinchilla; el jefe de Estado panameño, Ricardo Martinelli; el presidente guatemalteco, Otto Pérez Molina; y el primer ministro canadiense, Stephen Harper, así como representantes de alto nivel del resto de países observadores.
Será una buena ocasión, según han señalado a Efe fuentes del Gobierno, para apuntalar el compromiso del Gobierno con América Latina, evidenciar la importancia de esa zona para España tanto en el ámbito político como económico (especialmente en un momento de crisis como el actual) y ratificar el papel de España como nexo entre esta región y la UE.
Precisamente, Rajoy se trasladará a Cali directamente desde Bruselas, donde el miércoles, día 22, participará en la reunión extraordinaria del Consejo Europeo que, entre otros asuntos, analizará la reforma del sector energético y la lucha contra el fraude fiscal.
Los cuatro países integrantes de la Alianza concentran el 40% de las exportaciones españolas a América Latina (5.000 millones de euros) y el 40% de la inversión en la zona (45.000 millones de euros).
Pero los objetivos del Ejecutivo en la cita de Colombia van más allá de la relación con Latinoamérica y ponen la vista en el continente asiático, ya que, además de crear un área de libre comercio ente los países integrantes de la Alianza, ésta pretende promover las exportaciones hacia la cuenca del Asia-Pacífico
Se trata de una zona en la que el Gobierno considera que hay un enorme potencial para los intereses españoles, y la gran implantación de empresas y bancos españoles en América Latina hace que este foro se pueda convertir en un puente hacia Asia.
Con ese horizonte, Rajoy, además de intervenir en la reunión de jefes de Estado y de Gobierno asistentes a la cumbre, participará en un encuentro empresarial que se celebrará de forma paralela.
La trascendencia de Asia para la economía española hace que el jefe del Ejecutivo tenga previsto viajar este año a China, sin fecha concreta aún, y entrevistarse con los nuevos dirigentes del país: su presidente, Xi Jinping, y su primer ministro, Li Keqiang.
Las fuentes del Gobierno no descartan una visita de Rajoy a Japón coincidiendo con la celebración del Año de España en este país, que abarcará desde el próximo 1 de junio hasta el 31 de julio de 2014.
La Alianza del Pacífico es el proceso de integración más reciente de América Latina, y el Gobierno español subraya que está demostrando su dinamismo en resultados concretos y en capacidad de atracción.
Este foro se estableció formalmente el 6 de junio de 2012 mediante la suscripción del acuerdo marco, aunque sus orígenes se remontan a 2011, cuando lo propuso el ex mandatario peruano Alan García.
La Alianza suma 210 millones de habitantes, representa casi 35% del producto interior bruto (PIB) de Latinoamérica y tuvo una tasa promedio de crecimiento de 5% en 2012, por encima del nivel mundial en ese año, que fue de 2,2%.