El análisis, preparado por la Comisión Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional, mostró que después del canje de deuda, la deuda griega podría caer hasta el 116,5% del PIB del país en el 2020.

Bruselas. El paquete de nuevo financiamiento, reestructuración de deuda y reformas puede poner a la deuda griega en una senda sostenible, pero Atenas debe ceñirse a las buenas políticas hasta el 2030 para que funcione, mostró un análisis de sostenibilidad de la deuda realizado por prestamistas internacionales.

El análisis, preparado por la Comisión Europea, el Banco Central Europeo (BCE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI), mostró que después del canje de deuda del fin de semana la deuda griega podría caer hasta el 116,5% del Producto Interno Bruto (PIB) del país en el 2020 y por debajo del 90% en el 2030.

"Los resultados muestran que el programa puede colocar la deuda griega en una trayectoria sostenible", dijo el análisis, obtenido por Reuters.

"Sin embargo, hay riesgos significativos de que los declives de la deuda pueden ser interrumpidos o incluso revertidos por choques. En un escenario alternativo, menos favorable, la proporción de deuda en el 2020 todavía estaría por encima de 145% del PIB", indicó el documento.

"Por otra parte, dado el alto nivel posible y la proporción de la deuda principal, las perspectivas de que Grecia pueda regresar al mercado al final del programa son inciertas", agregó.