China informó el lunes una expansión de su economía del 3,9% más rápida de lo esperado en el tercer trimestre, pero los datos de septiembre mostraron importaciones de bienes y ventas minoristas débiles, lo que refleja su demanda interna aún moderada.
Incluso en su débil estado, el consumo de bienes y servicios de los hogares representó más de la mitad del crecimiento del producto interno bruto en el tercer trimestre, lo que subraya su enorme peso en la economía.
El crecimiento económico de China está experimentando un bache inicial en el cuarto trimestre, ya que las restricciones y las ansiedades provocadas por la COVID-19 frenaron aún más los viajes y los envíos, limitando el consumo y el comercio en la segunda economía más grande del mundo.
Las estadísticas de movilidad, desde el tráfico de pasajeros del metro en las ciudades y las cancelaciones de vuelos hasta el manejo de contenedores domésticos en los principales puertos, han empeorado en octubre a pesar de la caída de los casos locales de coronavirus, lo que sugiere que las medidas preventivas de COVID-19, o el miedo a esas medidas, siguen sofocando la actividad económica.
China informó el lunes una expansión de su economía del 3,9% más rápida de lo esperado en el tercer trimestre, pero los datos de septiembre mostraron importaciones de bienes y ventas minoristas débiles, lo que refleja su demanda interna aún moderada.
Incluso en su débil estado, el consumo de bienes y servicios de los hogares representó más de la mitad del crecimiento del producto interno bruto en el tercer trimestre, lo que subraya su enorme peso en la economía.
Mike, un maestro de escuela internacional en Xian, dijo que había decidido quedarse en la ciudad.
"Simplemente no vale la pena el riesgo financiero ni la tensión mental de tener que lidiar con el encierro en otra ciudad, cancelaciones interminables de vuelos, etc.", dijo a Reuters, solicitando ser identificado solo por su nombre de pila.
Un indicador de la movilidad de las personas en China se desplomó un 29,5 % el 23 de octubre con respecto al año anterior, frente a una disminución del 27,5 % una semana antes, escribió Nomura en una nota de investigación, citando datos de GPS rastreados por el gigante chino del motor de búsqueda Baidu.
La proporción de vuelos cancelados a vuelos programados se mantuvo elevada, aumentando a 68,33% durante la semana del 18 al 24 de octubre desde el 67,14% de la semana anterior, según cálculos de Reuters basados en datos de la consultora de tráfico aéreo Variflight.
El tráfico de contenedores en ocho puertos principales cayó un 7,3 % entre el 1 y el 10 de octubre respecto al año anterior, en comparación con un aumento del 4,4 % en los últimos 10 días de septiembre, en parte debido al empeoramiento del comercio interno, según mostraron los datos de la Asociación de Puertos y Puertos de China.
Un índice que mide la facturación del transporte de carga por carretera cayó un 26,2% el 21 de octubre respecto al año anterior frente a una caída del 23,7% una semana antes, según Nomura.
A medida que China declara la guerra a Omicron este año, las autoridades intensificaron las pruebas de PCR en las poblaciones locales y aumentaron los requisitos para los visitantes, lo que desalienta el deseo de viajar. Las inspecciones de mercancías del extranjero y de otras provincias también han retrasado las entregas durante días e incluso semanas.
China ha subrayado repetidamente sus políticas de cero COVID-19 incluso cuando los casos disminuyen. Las nuevas infecciones locales cayeron un 24% a 6.096 entre el 18 y el 24 de octubre respecto a la semana anterior.
'QUÉDATE EN CASA'
A pesar de la caída, las ciudades de Guangzhou, Zhengzhou y Xian han informado de un resurgimiento, con el riesgo de implementar más restricciones en su población combinada de más de 44 millones.
Las ciudades, los principales centros logísticos nacionales y productores de todo, desde automóviles y autopartes hasta maquinaria y productos electrónicos, informaron un total de 804 nuevos casos locales entre el 18 y el 24 de octubre, frente a los 431 en el período anterior de siete días.
En Zhengzhou, a los residentes de algunos distritos se les ha dicho que "se queden en casa", mientras que cenar en los restaurantes está prohibido. Las escuelas, las instituciones de cuidado infantil y las instituciones de capacitación fuera del campus funcionan solo en línea.
El tráfico del metro de Zhengzhou se desplomó un 79% del 11 al 15 de octubre, según los últimos datos disponibles.
En Guangzhou, las universidades han estado cerradas desde el lunes en un distrito, mientras que las escuelas primarias y secundarias y los jardines de infancia se han puesto en línea y los restaurantes han estado cerrados desde la semana pasada. En otro distrito, los cines, teatros, bares, gimnasios y cibercafés permanecieron cerrados hasta el miércoles.
El tráfico del metro en Guangzhou cayó un 8,8% entre el 18 y el 24 de octubre con respecto a la semana anterior, según mostraron los cálculos de Reuters basados en datos publicados por los operadores de metro locales.
"Dado que es probable que la estrategia COVID de 'compensación dinámica' se mantenga en el futuro previsible, es poco probable que el consumo se recupere", dijo el grupo de investigación chino Gavekal Dragonomics.
