Los expertos una buena alimentación permite extraer la máxima performance principalmente del cerebro que es el gran maestro de nuestra orquesta corporal.
Un buen líder se caracteriza por promover la participación y por entregar confianza a su equipo a través de la autonomía. A esto se le debe sumar, la buena comunicación, la innovación, la capacidad de utilizar de forma correcta la inteligencia emocional y el respeto, entre otros.
De acuerdo a una publicación de EAE Business School en su blog Retos Directivos, los líderes no nacen de la nada. Toda habilidad, competencia o talento de gestión debe encontrar un campo para ser materializado. Lo que sabemos cuenta, pero cuenta mucho más el cómo lo traslademos a la práctica. Y dirigir una empresa consiste justamente en eso.
Sin embargo, existe un programa llamado método DeRose, que trabaja el desarrollo de las habilidades de liderazgo de forme diferente, y le entrega a la buena alimentación un rol fundamental en esta camino por ser un mejor líder.
Para Luiz Furtado, director de la academia DeRoseMethod en Chile la nutrición es importante en el desarrollo de un líder porque el ser humano está compuesto de varias dimensiones, cuerpos o vehículos (físico denso, físico energético, emocional, mental e instiucional).
En ese sentido, el experto señala que se debe alimentar todos esos cuerpos o dimensiones muy bien para que todas estén trabajando en su máxima performance. “La primera dimensión, que es el cuerpo físico denso, no es diferente. Es esencial abastecerla con todos los nutrientes que ayuden al mejor funcionamiento de esa dimensión, es decir, el mejor rendimiento del cuerpo. Eso significa poder extraer la máxima performance principalmente del cerebro que es el gran maestro de nuestra orquesta corporal”.
“Al alimentarse conscientemente pasamos a elegir mejor nuestra alimentación y por lo tanto qué ingerir. Con esa elección consciente sin perder el sabor de ninguna manera, estaremos previendo al cuerpo, órganos e incluso el cerebro de todo lo que necesitan para trabajar a su máximo rendimiento además de generar placer por la alimentación lo que también ayuda a la disminución del estrés diario”, explicó Furtado.
“Por ejemplo cuando se come algo demasiado pesado en el almuerzo y rendimiento por la tarde disminuye porque grande parte de la sangre y la energía corporal se concentra en el sistema digestivo para hacer su trabajo. Un equívoco común que también es un gran ejemplo es cuando se come mucho azúcar para sanar una debilidad emocional. A través de esa actitud estamos intentando alimentar la dimensión emocional con la física densa. El resultado es que continuamos sin alimentar el cuerpo emocional (qué quizás necesitaba apenas de un abrazo de afecto) y tampoco el físico denso que necesitaba de nutrientes”.
Para verificar con facilidad si estamos alimentándonos bien Luiz suigiere imaginar un árbol. Si durante la semana consumimos varias partes de un árbol, es decir: raíces (papas, zanahoria, etc), tronco (cauli flor, palmito, etc), hojas (ensaladas en general), flores (bróculi, etc), frutos (mucha variedad), semillas, granos y legumbres, y agregamos un poco de los lácteos sabremos fácilmente que el estará con una alimentación variada y previendo todos los nutrientes necesarios. “Escuchar el cuerpo es esencial. Muchas veces el cuerpo nos envía señal de lo que quiere comer. debemos dar atención a ese llamado y observar si es realmente el cuerpo físico denso que está "hablando" o el vehículo emocional”.
En ese sentido, para DeRose Method Chile, para poder liderar y alcanzar el mayor rendimiento profesional, la alimentación debería ser sin carnes, rica y variada, muy especiada y condimentada. Podemos romper cualquier paradigma en cuanto a no consumir carnes conociendo nombres como Carl Lewis, Gandhi y Leonardo Da Vinci que no se alimentaban con carnes además de los numerosos atletas de elite que han adoptado esa alimentación y aumentado sus performances.
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