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¿Es un buen negocio o no invertir en mujeres?
Lunes, Febrero 1, 2016 - 13:45

Muhammad Yunus, Premio Nobel de la Paz ha impulsado el emprendimiento femenino en India y a nivel mundial a través de un modelo de microcréditos y educación financiera.

Cerca de 28 trillones de euros podría añadirse a la economía mundial si las mujeres desempeñaran un papel similar a los hombres en los mercados. La Organización de las Naciones Unidas (ONU) en Davos ha pedido dar un "salto cuántico" en el empoderamiento de las mujeres para movilizar plenamente el potencial económico de mitad de la población mundial no explotada.

Sin ir más lejos, 85% de las decisiones de compras en Estados Unidos que van desde la compra de un auto hasta la salud son influenciadas por mujeres, representando un mercado de consumo de 5 trillones de dólares anuales, la mitad del GDP de EE.UU.

En el foro APEC en Filipinas, encuentro en el que tuve el honor de participar, la discusión se centró en el impacto de las tecnologías en el empoderamiento económico de las mujeres y cómo las tecnologías pueden ayudar a las mujeres escalar nuevos mercados y mover sus negocios al siguiente nivel.

Sin embargo, al 2016, en plena era Digital aún existen barreras estructurales para el empoderamiento económico y la plena inclusión de las mujeres en la actividad económica tales como: acceso financiamiento y algo tan básico como la apertura de una cuenta corriente en el banco.

Muhammad Yunus, Premio Nobel de la Paz ha impulsado el emprendimiento femenino en India y a nivel mundial a través de un modelo de microcréditos y educación financiera logrando comprobar lo siguiente:

1. Las mujeres hacen mejor uso de pequeños préstamos que los hombres.

2. Las mujeres tienen un mejor historial de devolución.

3. Las mujeres son una enorme fuente laboral sin explotar.

4. Las mujeres tienen derecho a acceder al capital.

5. Las mujeres que reciben préstamos adoptan estilos de vida más saludables y tienen poder de decisión.

Una mujer empoderada financieramente tiene mayor libertad para tomar decisiones en relación a su futuro y a su carrera. 

Hoy uno de los grandes desafíos que enfrentamos las mujeres es la necesidad de tener opciones para decidir emplearnos o crear una empresa. Cuando la mujer emprende con el propósito de trascender en el tiempo y generar empleos, decide cambiar las reglas del juego. Tiene la posibilidad de crear una escala de sueldos equitativa entre hombres y mujeres, tiene la opción de crear un directorio heterogéneo, tiene la posibilidad de crear un modelo flexible de trabajo y en definitiva deja de luchar contra el sistema, diseñando un nuevo modelo. Un mujer que emprende está diseñando futuro y está abriendo puertas a toda una nueva generación de hombres y mujeres

¿Por lo tanto es o no un buen negocio invertir en mujeres?

* Por Bárbara Silva, CEO BeSTinnovation y directora SingularityU Chile.

Autores

Bárbara Silva