Pasar al contenido principal

ES / EN

Franco Chamochumbi, de Blended: "Combinar lo presencial con lo digital puede permitir dar seguridad a los estudiantes y familias"
Domingo, Noviembre 22, 2020 - 19:49

Mientras algunos colegios han implementado por estos días un modelo híbrido, ya se empiezan a formular planes para el retorno a clases en 2021. Y con esto, surgen algunas dudas en relación a cómo debería ser el regreso, qué heramientas digitales podrían permanecer y cómo será la evolución de la demanda de aplicaciones de edtech.

Algunos colegios están apostando por concluir el año con clases online, mientras otros están dejando que los alumnos vuelvan voluntariamente, en una combinación de clases presenciales y online. Si bien ambos modelos son válidos, aún existen dudas y varios se inclinan por una combinación de ambos.

Algunos expertos en este tema apuntan a que intentar mantener la 'normalidad' del año escolar, mediante clases online, no es del todo posible. Esto, porque los padres no pueden sustituir a los docentes y estos, a su vez, tuvieron que enfrentar varios desafíos para enseñar en estas nuevas condiciones.

Desde la plataforma Blended, su country manager, Franco Chamochumbi, dice que si bien será una buena noticia poder al menos tener un sistema semipresencial, "tampoco quiere decir que nos olvidemos de lo aprendido en estos tiempos virtuales ni que desechemos todas las herramientas que hemos usado este año. Por el contrario, la posibilidad de combinar mejor lo presencial con lo digital puede permitir dar esa seguridad a los estudiantes y sus familias de no exponerse tanto, pero mejorar así mismo el desarrollo de habilidades, competencias y contenido pedagógico".

Según explica, estas herramientas deben propiciar una buena comunicación entre los colegios y las familias sin dejar de dar un marco institucional claro y ordenado. Además, deben intentar ser especializadas y no estar dentro de las redes sociales convencionales.

Ante la posibilidad de que los estudiantes quieran conservar las clases online, Chamochumbi indica que aunque es totalmente factible en algunos niveles en particular, como estudios superiores o cursos de algún tema específico, cuando se trata de la educación inicial, primaria y secundaria, es definitivamente muy importante el componente de presencialidad, que permite desarrollar diversas habilidades.

"La tecnología no puede verse como un reemplazo de las aulas presenciales, sino un complemento que ayuda tanto dentro como fuera de las mismas", agrega.

Por ejemplo, añade el country manager, "las herramientas tecnológicas implementadas permiten trabajar en una metodología de clase invertida, haciendo un buen uso del contenido asíncrono. Esto permite compartir contenidos educativos a través de videos, imágenes y documentos para que los alumnos lo revisen cuando crean necesario. Luego, en el momento que el docente pueda tener interacción directa con los alumnos, podrá enfocarse en absolver dudas, profundizar temas, desarrollar proyectos con competencias trasversales, entre otras cosas".

-Considerando todo el tiempo que los niños y adolescentes han estado con clases virtuales, ¿de qué manera se deberían retomar las clases presenciales en cuanto a horas de cursada, días que se asiste a la escuela, forma de enseñanza, entre otras cosas?

No hay una fórmula única o mágica, ni la educación debería medirse en días u horas cursadas. El objetivo de los colegios es que los alumnos maximicen sus aprendizajes y puedan desarrollar diversas competencias y habilidades de la mejor forma posible. Para esto hay y habrán diferentes enfoques válidos
que se pueden aplicar en diferentes colegios.

En estas decisiones, de carácter logístico, influyen diversas variables como la infraestructura del colegio, la cantidad de alumnos que tienen, la cantidad de personal docente, la situación epidemiológica de su comunidad y localidad, entre otras cosas.

Lo importante es que se ponga delante la calidad del proceso educativo y la posibilidad de que los niños disfruten este proceso para que alcancen su máximo potencial. Para eso sin duda tendrán que involucrarse metodologías y herramientas que contribuyan con la relación entre el colegio y las familias.

-Todavía no se sabe qué puede pasar el 2021, por lo que no se descarta mantener una educación escolar blended. En este caso, ¿qué foco deberían tener los colegios y los apoderados, en qué herramientas invertir y qué mensaje dar a la comunidad escolar?

Sí, es probable que la educación al inicio del 2021 tenga que ser todavía de forma 100% virtual o remota, en especial en las grandes ciudades. En ese caso, ahora los colegios tienen la oportunidad de planificar con anticipación, adquirir, probar y capacitarse en plataformas especializadas donde puedan centralizar todo lo que necesitan para un correcto desenvolvimiento de las clases.

Esto va mucho más allá de cualquier plataforma de videollamadas. Es necesario considerar también un espacio seguro y ordenado donde compartir los links respectivos, las clases grabadas, otros videos con contenido pedagógico, entre otros comunicados que pueda hacer tanto el colegio como los profesores a padres y alumnos. Como mencionamos, estos espacios deben ser plataformas especializadas con entornos pensados exclusivamente en el colegio.

Finalmente, pueden considerar también digitalizar toda una serie de variables como asistencias, calificaciones, libretas de notas entre otro tipo de seguimientos, llevando así absolutamente todo a una plataforma en la nube. De esta forma, el trabajo de todos los docentes y directivos será más fácil en ese sentido, y tendrán más tiempo para dedicarle a lo más importante: los alumnos.

-Varios colegios deben haber invertido en plataformas especializadas en educación virtual. De cambiar al formato presencial, ¿cómo sería posible seguir utilizando estas aplicaciones?

Va a depender de que hayan adquirido y qué funcionalidades tienen. Por ejemplo, nuestros colegios clientes de Blended van a poder seguir aprovechando las funcionalidades con las que cuenta la plataforma, dado que tiene un enfoque de comunicación con la comunidad entera, es decir entre colegio, directivos, docentes, alumnos y padres de familia. Entonces incluso con clases 100% presenciales la aplicación funciona perfecto para que compartan fotos y videos a los padres acerca del trabajo que desarrollan sus hijos y las condiciones en las que se dan. De igual forma, puede servir como el medio oficial para compartir las tareas, registrar asistencias, calificaciones, libretas de notas, y toda la información en general que se genera dentro del colegio.

Definitivamente habrá otras plataformas como de videollamadas que su uso ya no sería tan necesario, pero el resto que implique cosas como concursos online, registro de información, y el compartir esta misma, así como novedades y comunicados, podrá mantenerse. Todo esto facilitará mucho el trabajo de profesores y directores, así como permitirá que los padres se mantengan bastante involucrados. La tecnología debe continuar definitivamente como complemento de la educación facilitando diferentes procesos y mejorando las dinámicas tanto dentro como fuera del aula.

-En el caso de Blended que ha logrado cautivar a más clientes durante la pandemia, ¿qué necesidades han visualizados en los colegios y qué soluciones han tenido que desarrollar a propósito de esto?

La primera necesidad que vimos fue la de iniciarse en el mundo digital, empezar su transformación digital que había quedado tan relegada para la mayoría de colegios. Esto era todo un reto, dado que existe aún un poco de temor sobre las herramientas tecnológicas e incluso algo de resistencia entre algunos docentes que se vieron obligados a ceder ahora ante la coyuntura.

Ante eso, nos aseguramos de tener una plataforma lo más intuitiva y fácil de usar posible, con entornos que resulten familiares para cualquier persona de cualquier edad. Además ponemos a disposición asesores personalizados que acompañan de cerca a los colegios y material de apoyo para que todos los docentes encuentren su adopción de la plataforma lo más sencilla posible.

Otra necesidad clara que surgió fue la de potenciar las aulas virtuales, por donde ocurrió este año toda la interacción de docentes y alumnos y la transmisión de información y contenido, además de las videollamadas. Los docentes tenían la necesidad de seguir asignando tareas y recopilando las evidencias de los avances de los alumnos en las competencias planteadas, además de dar retroalimentación sobre esas tareas entregadas.

Para eso, sacamos un nuevo módulo de gestión de tareas con diversas funcionalidades. Algunas de ellas para asignar claras indicaciones, poder aplazar el periodo de entrega, habilitar espacios para que los alumnos hagan preguntas sobre la tarea y el profesor las absuelva, realizar devoluciones con retroalimentación de la tarea entregada, entre otras cosas muy útiles para esa dinámica fluida entre docentes y alumnos. Todo esto siempre bajo la supervisión de los padres que también tienen posibilidad de ver el estado de las tareas asignadas a sus hijos.

Finalmente, también mejoramos nuestro módulo de mensajes privados, una especie de WhatsApp dentro de la plataforma pero con posibilidad de poner asuntos en los mensajes y también ver si fueron leídos o no. Así poder tener comunicación personal y privada con padres o alumnos en particular, todo dentro de una plataforma especializada y segura sin necesidad de usar redes sociales públicas.

-¿Cómo creen que evolucione la demanda de soluciones de edtech a nivel latinoamericanos o en los países en los que tienen presencia? ¿Estas plataformas tendrán que democratizarse aún más?

Creemos que estamos viviendo un momento quiebre en la industria educativa. Esta crisis sin duda representa un momento fundamental para que todos los colegios inicien su transformación digital y a partir de ahora en adelante incorporen muchos más elementos tecnológicos como complemento a su labor de enseñanza o gestión, tanto dentro como fuera del aula.

Eso va a generar un crecimiento sostenido dentro de todo el mundo edtech en latinoamérica definitivamente, lo cual será una excelente noticia dado que permitirá que las opciones existentes se diversifiquen y se consoliden también en los diferentes mercados. Así, toda la industria en general podrá sumar esfuerzos con la visión de alcanzar una educación de mayor calidad y también más accesible para todos y todas.

Para lograr esta accesibilidad sin duda será necesario que muchas herramientas logren democratizarse aún más. Eso también será algo que el crecimiento de la industria podrá propiciar, conforme se vayan consolidando ciertos modelos de negocio y capacidad para tener diversos planes en torno a las diferentes necesidades que existen.

Por ejemplo este año en Blended hicimos grandes esfuerzos para poder tener una versión gratuita. Creemos firmemente que el acceso a una educación de calidad no debe tener costo, y en línea con eso fue que vimos oportuno volver aún más accesible nuestra plataforma para todos los que lo necesiten. Creemos que ese es el camino que varias otras empresas más adoptarán o ya están adoptando, lo cual será muy beneficioso para la industria en general.

Autores

Daniela Arce