Pasar al contenido principal

ES / EN

Haitianos ven a Obama como su salvador
Martes, Enero 19, 2010 - 15:51

En el caos y la miseria de la capital haitiana, aturdidos sobrevivientes se consuelan con la promesa de Obama de ayudar personalmente a Haití.

Puerto Príncipe. Los haitianos esperan que Barack Obama sea su potencial salvador, afirmando que el primer presidente negro de Estados Unidos es su mejor esperanza para construir un país nuevo desde los escombros de su patria golpeada por un terremoto.

En el caos y la miseria de la capital haitiana, donde una gran parte quedó en ruinas por el terremoto, aturdidos sobrevivientes se consuelan con la promesa de Obama de ayudar personalmente a Haití.

"El señor Obama ha dicho que ayudará a salvarnos. Estoy rezando a Jesús por eso", dijo Steeve Grange, un estudiante de secundaria de 18 años, quien se encontraba entre una multitud esperando para cargar sus teléfonos móviles de los cables de energía de un generador de una estación de radio.

"Los haitianos están muy orgullosos del señor Obama", agregó Grange.

Muchos en esta empobrecida nación caribeña ven a Obama como una superestrella y familiar de Haití, donde esclavos rebeldes derrocaron al Gobierno colonial francés para declarar la independencia en 1804 y convertirse en la primera república independiente regida por negros.

"El hecho de que Obama sea el primer presidente negro de Estados Unidos y que Haití sea la primera república negra podría forzarlo a estar más atento a las necesidades de Haití", dijo Patrick Moussignac, director de Radio Television Caraibes, el mayor grupo de emisoras del país que ha proporcionado energía gratuita a las personas para recargar sus celulares.

Una semana después de uno de los peores desastres naturales del planeta, la ayuda de emergencia está aún recién empezando a llegar a los haitianos desesperados y hambrientos. El Gobierno estima entre 100.000 y 200.000 muertos en total.

Existe temor en la ciudad de que la frustración por la lenta distribución de ayuda lleve a la violencia en un país al que habitualmente se lo describe como un Estado fallido.

Remarcando la desesperada situación del país, el haitiano Berly Renfort, quien vivió en Florida hasta ser deportado por un enfrentamiento con la ley, dijo que preferiría pasar 10 años encerrado en una cárcel estadounidense que estar otro día en la nación que dejó a los 6 años.

"Al menos en prisión te dan tres comidas al día", dijo Renfort, de 21 años, enfundado en una bermuda naranja, zapatos negros de baloncesto y una gorra de los Yankees de Nueva York a tono.

Incluso Renfort espera que Obama actúe para superar los obstáculos de los esfuerzos de socorro y asegurar que la ayuda siga llegando cuando Haití ya no sea centro de atención de la prensa mundial.

Es una muestra de la popularidad de Obama en la isla, pero también del tamaño del desastre, que la mayoría de los haitianos pidan desesperados el despliegue de tropas estadounidenses en las calles de la capital para ayudar a restablecer la ley y el orden.