Recordando una de sus más tradicionales rondas infantiles, el buscador de internet destaca a la única mujer iberoamericana en obtener el Premio Nobel. Su nombre ha sido "trending topic" mundial.
Los millones de personas que usan el buscador Google en el mundo se encuentran con un particular saludo, que recuerda uno de los poemas más reconocidos de Gabriela Mistral: "Dame la mano y danzaremos, dame la mano y me amarás".
Con este "doodle", que se basa en "Dame la mano" -una de sus más tradicionales rondas infantiles-, la compañía estadounidense homenajea los 126 años que se recuerdan este martes del nacimiento de la reconocida poetisa chilena, que hasta hoy es la única mujer iberoamericana en recibir el Premio Nobel de Literatura.
Durante el día, las redes sociales han hecho eco también de la fecha. Las palabras “Gabriela Mistral” se encuentran en los primeros lugares de los "trending topic" en Argentina, Venezuela, México, Chile y Venezuela. A nivel mundial, incluso, no abandona el top ten.
Bajo el nombre de Lucila María del Perpetuo Socorro Godoy Alcayaga, la destacada intelectual y pedagoga nace en Vicuña, Provincia de Elqui, Región de Coquimbo, en el norte de Chile.
El nombre con el cual se hizo conocida fue un homenaje de la autora a la poesía y a la naturaleza. El apellido reconoce al poeta francés Federico Mistral y también al viento que lleva ese nombre.
Hija de un profesor, quien abandona el hogar cuando ella sólo tiene tres años, y de Petronila Alcayaga, la poetisa estuvo ligada desde temprano a la enseñanza. Una hermana mayor, producto de otra relación de su madre, se desempeñaba como profesora, actividad que llamó la atención de Mistral hasta convertirse en maestra.
Aunque su condición humilde no permitió que estudiara pedagogía en la universidad, hizo uso de un sistema de convalidación de conocimientos existente durante un tiempo en Chile. De ahí en adelante, no abandonó nunca este tema, desempeñándose en colegios por todo Chile y teniendo conciencia de su importancia como vehículo social.
De hecho, en la década del 20 fue invitada por el gobierno mexicano para que formara parte del equipo de expertos que sentó las bases del sistema educacional local, que perdura hasta hoy.
También se dedicó al servicio exterior, desempeñándose como cónsul de su país en distintas ciudades, tanto europeas como de América Latina. También en Nueva York, en donde mantuvo una estrecha relación con la escritora estadounidense Doris Dana, quien -finalmente- fue su albacea y pareja.
La condición homosexual de la escritora se mantuvo mucho tiempo oculta, hasta que -tras la muerte de Dana- su sobrina Doris Atkinson realizó gestiones para regresar a Chile en 2007 una serie de documentos de Mistral. En esa ocasión el tema fue ampliamente abordado, lo que significó el reconocimiento oficial del país.
Por lo demás, los diversos cambios ocurridos en Chile, permitieron tratar el tema con mayor tolerancia y altura de miras.
El principal argumento del jurado para entregarle el Premio Nobel en 1945 fue "su obra lírica que, inspirada en poderosas emociones, ha convertido su nombre en un símbolo de las aspiraciones idealistas de todo el mundo latinoamericano".
Entre sus obras más reconocidas se encuentran "Desolación", "Tala", "Recados, contando a Chile", "Los sonetos de la muerte y otros poemas elegíacos" y "Lagar", entre otros textos como ensayos y artículos periodísticos.
