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Las jugadas de Gilinski y la contraofensiva de SURA
Viernes, Junio 24, 2022 - 11:42

El empresario colombiano Jaime Gilinski viene moviendo sus piezas tácticamente como en un juego de ajedrez para dar jaque mate al Grupo Empresarial Antioqueño (GEA), pero esta semana no consiguió uno de sus objetivos debido al contraataque de SURA. La lucha por el control continúa.

En el ajedrez hay un movimiento táctico en el que un jugador fuerza a una pieza rival a dejar su posición actual, dejando el camino libre para ocupar una casilla importante. Se denomina “la desviación” y bien puede ser la próxima jugada de Jaime Gilinski, el empresario colombiano que desde noviembre del año pasado viene moviendo piezas para dar jaque mate al Grupo Empresarial Antioqueño (GEA), uno de los más importantes y tradicionales conglomerados empresariales de Colombia, que controla multilatinas emblemáticas como SURA, Nutresa y Argos a través de un entramado accionario que le ha permitido a lo largo de los años tener el control de los tres grupos.

En este caso, Gilinski ha intentado “desviar” las fichas en la Junta Directiva de SURA -donde es el mayor accionista y ya ocupa tres sillas- para autorizar al holding financiero a vender participación en el Grupo Argos, cuya Oferta Pública de Adquisición (OPA) inició esta semana, en otro movimiento táctico -y hostil- del magnate por el control del GEA.

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Con la oferta lanzada por hasta el 32,5% de Argos, van siete las OPA’s que Gilinski ha hecho en los últimos seis meses por las joyas de la corona del sindicato antioqueño y que le ha permitido adquirir el control de SURA (con el 34,5% de participación) y ser el segundo mayor accionista en Nutresa (con el 30,8%).

Si consigue su objetivo con el holding de infraestructura, Jaime Gilinski pasaría a controlar el 51% de su archirrival GEA y hacer su siguiente jugada: promover la integración de Bancolombia -el mayor banco del país y del que fue propietario hasta que en 1997 lo vendió a un empresario ligado al GEA en un movimiento que Gilinski consideró irregular- con el GNB Sudameris, la unidad financiera del Grupo Gilinski.

Visto de otra manera, 25 años después, el cuarto hombre más rico de Colombia contraataca.

De ahí la ofensiva del GEA, que no está dispuesto a dejarle el camino libre al banquero. Esta semana los presidentes de SURA y Nutresa renunciaron a la Junta Directiva de Argos, siguiendo los mismos pasos que se dieron en los directivos del holding financiero y del conglomerado de alimentos, en una jugada para incluir representantes de otro nivel que pudieran frenar la propuesta de Gilinski de modificar un estatuto para que la decisión de vender la participación de SURA en Argos recayera en los accionistas.

El movimiento funcionó para SURA que este jueves logró rechazar los planes de Gilinski y ahora será la Junta Directiva la que tenga la última palabra.

Pero el empresario, que se ha aliado con la familia real de Abu Dhabi para financiar las ofertas por las que ya ha pagado US$ 2.800 millones, insiste en sus buenas intenciones y dice que quiere mejorar el desempeño operativo de las empresas del GEA para obtener buenos rendimientos. Incluso algunos analistas le dan la razón al considerar que las empresas del conglomerado antioqueño podrían haber crecido mucho más, pero no lo hicieron, y con Gilinski al mando podría cambiar ese escenario.

Lo que sí está claro es que el magnate colombiano, que de niño soñó con ser banquero y que ha hecho su fortuna a través de una serie de adquisiciones bancarias en América Latina, tiene una estrategia bien definida y no dejará de mover sus piezas hasta conseguirlo. ¿Logrará el jaque mate?

Autores

Gianni Amador