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Logran imprimir en 3D tejidos humanos para atletas
Miércoles, Abril 17, 2019 - 14:30

Los tejidos aún no están listos para ser utilizados en pacientes, pues aún no se sabe cómo adaptarlos para personas específicas.

Algunas lesiones son difíciles de curar. No siempre se trata de las más graves. A veces, ciertas molestias latentes acaban convirtiéndose en una auténtica tortura para los deportistas de élite. Hasta el punto de que algunos necesitan periodos de recuperación más extensos de lo que creían en un principio, o incluso se ven obligados a tirar la toalla tras encadenar varias de solución difícil.

Un tipo de lesiones que entran dentro de esta categoría son las que se refieren al cartílago. Si está desgastado, este tejido no es fácil de recuperar. Pero no existe una alternativa de laboratorio sólida. De ahí que se explore con interés la posibilidad de imprimirlo en 3D. La mima dificultad se presenta con el tejido osteocondral. Y también las mismas expectativas.

Se trata de un tejido entre el propio cartílago y el hueso. Una zona delicada que ha dado enormes quebraderos de cabeza a deportistas de alta competición. Hasta ahora los esfuerzos por replicarlo en laboratorio habían sido vanos, pero un equipo de bioingenieros de la Universidad de Rice y de la Universidad de Maryland, en Estados Unidos, lo han logrado.

Los científicos han conseguido imitar el tejido osteocondral, que es difícil, pues su consistencia cambia. Han creado un biomaterial que han llenado de poros para que, una vez implantado, las células del paciente y los vasos sanguíneos se infiltren en él. De esta forma, es más fácil que estos tejidos impresos en 3D formen parte del cuerpo humano.

De la alta competición al gran público
La intención de los científicos es que estos tejidos impresos en 3D sirvan para curar a los deportistas de élite. Pero también le ven potencial para un público más amplio. Como suele ocurrir con algunos tratamientos médicos que empiezan por la alta competición, poco a poco, llegará a todos los que sufran una lesión en el tejido osteocondral.

Estos tejidos impresos en 3D aún no están listos para usarse en pacientes. Queda aún por resolver la cuestión de cómo diseñar implantes que se adapten perfectamente a una persona específica.

Pero, en todo caso, es una prueba más de cómo la impresión 3D puede ofrecer grandes avances en medicina.

Los científicos creen que se podrían curar rodillas, tobillos y codos que ahora resultan difícilmente recuperables. Se trata aquí de replicar los tejidos, pero otras investigaciones ya han logrado hitos reseñables en la bioimpresión, como la consecución de vasos sanguíneos.

Una vez que estén perfilados, estos avances poco a poco se colarán en los tratamientos médicos.

Autores

Pablo G. Bejerano / Think Big