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Accidente en Pemex: en seis segundos todo explotó
Viernes, Febrero 1, 2013 - 09:47

Todo fue destruido en tres pisos del edificio anexo B2. Cerca de 100 ambulancias y personal de rescate se concentraron en salvar vidas y atender a los heridos.

Excelsior.com.mx, Ciudad de México. Fue una explosión que en seis segundos destruyó el sótano y afectó severamente la planta baja, primero y segundo pisos del edificio B2 del complejo administrativo de Petróleos Mexicanos.

Ese fue el conteo mental que hizo Gustavo Gracidas, al tiempo que observaba cómo primero se desplomaban los plafones del techo y los muros volaban de la oficina de ventanilla única que se encontraba en la planta baja de ese edificio. Después una nube blanca cubrió esta torre de la colonia NuevaAnzures.

Cubierto de polvo, con una camisa que había dejado de ser blanca y apoyado por otro de sus compañeros para trasladarlo en su silla de ruedas, este empleado administrativo confirmó que el estruendo emergió del sótano, donde se encontraban áreas de limpieza, planta potabilizadora, maniobras y el archivo general corporativo de las subsidiarias de la compañía.

“Allá adentro todo voló, no hay paredes, no hay nada. En mi caso que ando en silla de ruedas salí ileso de lo que sucedió pero, ahí fue la explosión. Fueron como seis segundos en lo que sucedió todo”, dice mientras sortea nervioso a las decenas de empleados que estaban expectantes.

Las autoridades oficializaron que la explosión se dio a las 15:45 horas; Gustavo coincidió que era la hora de salida y el regreso de comer de otros que ya no pudieron concluir la jornada.

Dos minutos para salvar la vida. Jaime lo repite una y otra vez: “Tenía dos minutos de haber salido del área de maniobras, había mucho trabajo y pensé en quedarme a laborar horas extra, pero por algún motivo subí a checar a la planta baja cuando se dio la explosión en el sótano”.

En un principio este joven, quien apenas tiene unos meses de haber logrado obtener una base en ese corporativo, por instinto corrió para tratar de apoyar a sus compañeros, el escenario que refiere era como el de las escenas de los atentados en los países árabes: escombros, gritos, lamentos y en unos minutos más el ulular de ambulancias y personas corriendo sin rumbo, mientras que policías y otros empleados entraban en acción con cascos rojos.

Jaime fue uno de ellos, que se dedicó a buscar a una de sus compañeras, quien al salir tenía lesiones y sangre en el cuerpo; no había posibilidad de atenderla en el lugar y la demanda de traslado de heridos grave lo obligó a improvisar una ambulancia en su vehículo y llevarla hasta el sur de la ciudad en la zona de Picacho, donde se encuentra uno delos hospitales de Pemex.

Uno de los primeros funcionarios en llegar para hacer una valoración preliminar fue el jefe de la Policía del DF, Jesús Rodríguez Almeida, y luego el propio jefe de Gobierno del DF, Miguel Ángel Mancera asumió el mando, mientras llegaban funcionaros federales como el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, quien finalmente coordinó todos los operativos.

La policía y cuerpos federales de seguridad acordonaron en un perímetro aproximado de medio kilómetro a la redonda.

En la zona, los comercios fueron abarrotados por trabajadores de la paraestatal, mientras en las inmediaciones las miradas de los oficinistas era de angustia y también se observaba a mujeres llorando desesperadamente o hablando por teléfono celular para informar y saber de sus compañeros.

También arribaron elementos del grupo de rescate Topos y voluntarios, el estacionamiento aledaño de la torre fue acondicionado como un helipuerto, donde se hicieron traslado en cuatro aeronaves del agrupamiento cóndores y al que se sumó otro del Estado de México del GrupoRelámpago.

Más de de 100 ambulancias de la SSP-DF, el ERUM, la Cruz Roja, Protección Civil y la Secretaría de Seguridad del Estado de México y alrededor de 200 elementos del Ejército mexicano adscritos al Plan DN-III acudieron al lugar.

Por la tarde, al menos 15 perros de búsqueda y rescate de la Policía Federal y de asociaciones civiles apoyaron en la búsqueda de las personas en elsótano.

Las azoteas de las viviendas se convirtieron en miradores donde se observaron las labores de rescate y desde algunos, vecinos se comunicaban con sus familiares que estaban a la hora de la explosión.

“Es mi tío, nos dice que ya no salió, porque se quedó a ayudar a los compañeros; hay mucho desastre y ya comenzaron a separar a las personas muertas en el patio, la situación es muy triste allá adentro”, dio a conocer Mario al fumar el tercer cigarro en menos de 20 minutos.

“Mi hijo está atrapado”. Desconsolada, sin saber a dónde caminar, Gloria García comenzó a llorar cuando una mujer contestó el teléfono de su hijo Daniel y le notificó que su familiar estaba atrapado.

“¡No me dejan pasar, nadie me dice nada, hablé a su móvil y contestó otra persona y me dijo que todo estaba bien, pero no es cierto y ahorita me dijeron que mi hijo está adentro!”, fue lo que alcanzó a decir esta mujer antes de perder el control y llorar desesperadamente.

Frente a los reporteros repitió una y otra vez el nombre de su hijo: Daniel García, de 35 años, quien no salió a comer porque tenía mucho trabajo.

“Mamá me voy a quedar a trabajar porque hay mucha chamba”, fue la última vez que escuchó su voz.

Después de cinco horas de labores de rescate, el propio presidente Enrique Peña Nieto informó de una persona rescatada de entre los escombros, lo hizo a través de su cuenta de Twitter.

El presidente Enrique Peña Nieto informó que los rescatistas liberaron una persona con vida del edificio B2, contiguo a la Torre de Petróleos Mexicanos.

“El secretario de Gobernación me informa que se acaba de rescatar a una persona más con vida de entre los escombros”, reportó en su cuenta de Twitter @EPN.

Ya por la noche, después de las 22:00 horas, el complejo de Pemex fue desalojado.

Adentro, desolación y tragedia; afuera el caos y personas, que no perdían la esperanza porque les contestaran el teléfono para saber que todo estaba bien.

Las labores de rescate continuaron, pero cerca de las 22:00 horas los cuerpos de seguridad dieron una voz de alerta para desalojar la torre debido a la exploción.

Más tarde, la Secretaría de Gobernación dio a conocer que el incidente se debió al desplome de una trabe dañada, sin causar mayores problemas, por lo que las labores de rescate continuaron.

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Excelsior.com.mx