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Agro argentino pone fin a huelga comercial pero no depondrían las protestas
Martes, Junio 12, 2012 - 14:50

La confirmación generó alivio entre las firmas agroexportadoras de uno de los mayores proveedores agrícolas del mundo, que se vieron obligadas a usar sus reservas para poder cumplir con sus compromisos comerciales.

Buenos Aires. Las principales asociaciones agrarias de Argentina confirmaron este martes que la huelga que desarrollan desde la semana pasada concluirá a la medianoche, aunque advirtieron que harán nuevas protestas si el gobierno no se sienta a negociar sus políticas para el sector.

La confirmación generó alivio entre las firmas agroexportadoras de uno de los mayores proveedores agrícolas del mundo, que se vieron obligadas a usar sus reservas para poder cumplir con sus compromisos comerciales y ya estaban a punto de quedarse sin granos para procesar o embarcar.

"Termina una protesta pero no quiere decir que termine la lucha", afirmó en una conferencia de prensa Eduardo Buzzi, presidente de la Federación Agraria Argentina, una de las cuatro entidades que lanzaron la huelga comercial.

El dirigente dijo que le enviaron un pedido de reunión al ministro de Agricultura, Norberto Yauhar, y que esperan la convocatoria a una mesa de negociaciones que trate los problemas de los que se queja el sector, como la elevada presión impositiva, la fuerte regulación de los mercados y la pérdida de competitividad.

Sin embargo, advirtió que "nos mantenemos en estado de alerta y movilización".

Gran parte de los productores de Argentina dejó de vender granos y carne el miércoles pasado, en reclamo de cambios en las políticas agropecuarias de un gobierno con el que mantienen una tensa relación desde hace años.

Antes de ratificarse el fin de la medida de fuerza, fuentes del sector agroexportador habían manifestado su preocupación por la falta de abastecimiento de granos.

"Hasta ahora no paramos (las plantas procesadoras), pero no vamos a durar mucho si sigue el paro", declaró un ejecutivo de una de las mayores agroexportadoras que operan en Rosario, principal polo de la industria agraria argentina y uno de los más importantes del mundo.

La protesta no afectó las ventas externas de Argentina gracias a que los exportadores contaban con amplias reservas, ya que la recolección de soja -el cultivo estrella- está casi finalizada y la de maíz está muy avanzada.

"No creo que los exportadores tengan 'stock' para aguantar mucho. Por lo que estamos viendo, tienen que estar muy ajustados", expresó Fernando Botta, analista de la firma Agrobrokers, con sede en Rosario.

El disparador de la huelga comercial fue un alza en el impuesto a la tierra que aprobó la rica provincia de Buenos Aires, cuyo gobierno es un aliado de la presidenta Cristina Fernández.

Negocio limitados. Por la medida de fuerza, durante toda la semana casi no se reportaron negocios en el mercado de Rosario. Pero tras el fin de la protesta, la reactivación de las operaciones sería limitada.

"No esperamos un 'boom' de negocios porque el productor que no necesita (dinero para cumplir con compromisos) no se quiere quedar con pesos, aunque le guste el precio (de la soja)", destacó Botta.

En medio de una fuga de capitales, el gobierno aplicó en los últimos meses una serie de restricciones a la compra de divisas externas, lo que dificulta las operaciones en dólares, el refugio favorito de los ahorristas argentinos.

El martes ingresaron 1.006 camiones a las terminales de la zona de Rosario, muy lejos de los 4.609 que llegaron al polo agroexportador el mismo día del año pasado, según datos oficiales.

El país sudamericano es el mayor proveedor internacional de aceite y harina de soja y el segundo de maíz, pero la cosecha de ambos granos fue cercenada por variados problemas climáticos, lo que añade preocupación a la cuestión del paro, que la semana pasada impulsó los precios en la plaza de Chicago.

Autores

Reuters