La empresa quedó en la mira del gobierno por cortes en el suministro eléctrico durante la última semana de diciembre en la capital argentina y municipios aledaños, donde abastece a más de 2,3 millones de clientes.

Buenos Aires. El gobierno de Argentina busca un cambio de accionistas en la distribuidora de electricidad Edesur, controlada indirectamente por la italiana Enel, a la que ha responsabilizado por recientes cortes en el suministro, dijo el miércoles el jefe de los trabajadores del sector eléctrico.

La empresa quedó en la mira del gobierno por cortes en el suministro eléctrico durante la última semana de diciembre en la capital argentina y municipios aledaños, donde abastece a más de 2,3 millones de clientes.

El gobierno, tras anunciar que sancionaría a la compañía y que analizaba incluso quitarle la concesión del servicio, la intimó para que invierta rápidamente unos 100 millones de dólares en la mejora del sistema.

Oscar Lescano, secretario general del gremio Luz y Fuerza, dijo a Reuters que Edesur se verá "cercada y presionada" para aumentar su inversión, pero señaló que "mi percepción es que no creo que lleguemos al quite de concesion", una posibilidad analizada por el Gobierno de la presidenta Cristina Fernández.

Lescano, en una entrevista telefónica, dijo que "el Gobierno está buscando que vendan y se vayan" (los accionistas italianos), agregando que "acá, interesados argentinos (en el control de Edesur) hay".

Tarifa bajas. Compañías del sector eléctrico en Argentina, principalmente en Buenos Aires y sus alrededores, buscan desde hace años una actualización de las tarifas, virtualmente congeladas desde 2001/2002, cuando la economía del país colapsó y produjo una profunda depreciación de la moneda, una crisis bancaria y una cesación de pagos de la deuda soberana.