Además se anunció que el Estado iniciará un juicio contra la empresa Jindal por daños y perjuicios, ya que no cumplió con la inversión de iniciales US$600 millones en el emprendimiento

La Paz. El ministro de Minería, Mario Virreira, anunció que el Estado iniciará un juicio contra la empresa Jindal por daños y perjuicios, ya que no cumplió con la inversión de iniciales US$600 millones en el emprendimiento de el Mutún. Además informó que 13 empresas ya expresaron su interés en participar del proyecto minero.

“Les vamos a iniciar un proceso similar al que nos están haciendo para pedir una compensación por los daños que nos han hecho”, aseguró la autoridad en un contacto con la emisora Panamericana.

Jindal Steel & Power (JSP), a través de un comunicado emitido este martes desde su central en Nueva Delhi (India), anunció que interpondrá una demanda contra el Estado boliviano por daños y perjuicios causados por la rescisión del contrato para la explotación de hierro del Mutún.

Virreira respondió que Bolivia es la más afectada por lo ocurrido, porque la empresa no avanzó en la puesta en marcha del proyecto que se adjudicó en 2007. “No han invertido lo que debían invertir”, cuestionó.

La firma extranjera explicó que la decisión de su alejamiento fue asumida debido al “incumplimiento y la falta de voluntad de parte del gobierno de Bolivia para cumplir con sus obligaciones contractuales”.

La empresa oficializó su decisión el lunes, tras una reunión en Santa Cruz con autoridades nacionales, en la que no se logró allanar las condiciones puestas por las partes.

Los ejecutivos de la privada india plantearon condiciones como la garantía de no nacionalización de sus inversiones y la revisión de la ejecución de las boletas de garantía, mientras que la administración de Evo Morales rechazó la posición y demandó el depósito en una cuenta bancaria de los US$2.100 millones comprometidos para el proyecto.

El ministro de Minería informó que en breve lanzarán una nueva licitación para adjudicar la explotación del yacimiento de hierro, aunque reveló que 13 empresas ya expresaron su interés en ser parte del emprendimiento boliviano.

Añadió que el gobierno, por su parte acelerará trabajos para invertir en el 50% del yacimiento que le corresponde a fin de ocupar a los trabajadores que resulten afectados por la salida de Jindal.