“Si yo comparo la campaña de invierno con la campaña del año pasado, estamos hablando de una reducción bastante considerable", dijo el presidente de la Anapo, Demetrio Pérez.

La Paz. El presidente de la Anapo, Demetrio Pérez (Anapo) prevé una caída en la producción de trigo, soya, maíz y girasol de un 20% en la cosecha de invierno. Los factores que incidirán son las restricciones a las exportaciones, el clima y el contrabando de alimentos.

Así lo informó este miércoles el presidente de la Anapo, Demetrio Pérez, quien explicó que en este momento se mantienen las extensiones de producción como hace cinco años, porque no hay un crecimiento importante que pueda significar un impacto para garantizar la seguridad alimentaria.

“Si yo comparo la campaña de invierno con la campaña del año pasado, estamos hablando de una reducción bastante considerable (...), en el orden de más o menos el 20% de la producción en volúmenes”, manifestó el ejecutivo de esa organización.

Según datos difundidos por el Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras, la superficie agrícola cultivada entre 2009-2010 en Beni y Santa Cruz ascendió a 1,89 millones de hectáreas, lo cual representó el 67% de las hectáreas cultivadas a nivel nacional.

En criterio de Pérez, los factores que incidirán en la caída de los volúmenes de producción de alimentos son las restricciones a las exportaciones, el clima y la importación ilegal de alimentos como el maíz que proviene de la Argentina, lo cual causó la caída en los precios en el mercado interno y desincentivó a los agricultores a seguir produciendo.

El presidente de la Anapo estimó que en el caso de la soya, la producción durante la campaña de invierno ascendería a 450 mil toneladas (t). En el caso del girasol, se cosecharía 1,4 millones de t de una extensión sembrada de 200 mil hectáreas.

Asimismo, la producción de maíz, como consecuencia de la campaña, llegaría a entre 300 mil y 400 mil t. “En este momento, aparte de que la producción interna ha ido en bajada, hay un contrabando de maíz que está ingresando de la Argentina, que es un tema que también ha afectado”, remarcó Demetrio Pérez.

Por su parte, el coordinador del Programa de Apoyo a la Seguridad Alimentaria (PASA), Remy González, rechazó las declaraciones de Pérez y aclaró que la producción de oleaginosas como el trigo, maíz y soya no bajarán en la campaña de invierno. Por el contrario, dijo que la producción se mantendrá o “va a ir aumentando”, porque las lluvias registradas han sido tardías. Aclaró que en el caso de las restricciones a las exportaciones de alimentos que observa Pérez, los ministerios correspondientes “están buscando mecanismos para que la producción que se tenga, luego de haberse garantizado el mercado interno a precio justo, llegue a otros mercados que no sea el interno”.

“Yo creo que hay instituciones que buscan protagonismo, pero que lo hagan de manera más sana, sin estar especulando y diciendo que se va a reducir la producción de alimentos”.

Extensión sembrada. El presidente de la CAO, Julio Roda, dijo el 14 de octubre que en la campaña de invierno se sembraron 741 mil hectáreas de soya, maíz, trigo y girasol.

IBCE pide al Gobierno políticas agresivas

El gerente general del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), Gary Rodríguez, sugirió al Gobierno aplicar políticas más “agresivas e inteligentes” para atraer inversión nacional y extranjera al sector agrícola.

“El sector productor es muy sensible a las señales que puedan venir del Estado, porque si son timoratas también lo será la inversión. Pero si son agresivas e inteligentes y están conectadas al mercado internacional, con seguridad que van a ser un buen aliado del Gobierno”, dijo.

Medidas. En criterio de Rodríguez, para asegurar la producción de alimentos, el Órgano Ejecutivo debe garantizar la seguridad jurídica sobre la tierra y la inversión, mercados tanto internos como externos y políticas públicas concertadas entre el sector privado y el público.

También indicó que los programas del Seguro Agrícola, que no son universales, y los proyectos de riesgo para los 300 municipios no son suficientes para apoyar al sector agropecuario.

El presidente de la Asociación Nacional de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo), Demetrio Pérez, señaló que su sector planteó al Gobierno desde hace varios meses el uso de semillas transgénicas para afrontar los cambios climáticos y evitar pérdidas por las plagas.

Asimismo, demandó una solución al tema de las restricciones a las exportaciones. “En los últimos días hubo buenas señales de los ministros, pero no hay todavía respuestas concretas en normas o leyes para que ese ambiente de incertidumbre pueda disiparse y que el productor pueda hacer inversiones y se pueda ampliar la frontera agrícola”, afirmó.