Así lo explicó el máximo ejecutivo de la Gerencia Nacional de Recursos Evaporíticos (GNRE) de la Comibol, Luis Alberto Echazú, ante la consulta de si el Ejecutivo elegirá a uno de los cinco países que firmaron memorándums de entendimiento.
Bolivia no sólo escogería a un solo socio para la tercera fase de la industrialización del Salar de Uyuni, que comprende la fabricación de baterías, sino a otros, porque existe una cantidad de productos que se pueden desarrollar en el lugar.
Así lo explicó el máximo ejecutivo de la Gerencia Nacional de Recursos Evaporíticos (GNRE) de la Comibol, Luis Alberto Echazú, ante la consulta de si el Ejecutivo elegirá a uno de los cinco países o empresas que firmaron con el Gobierno memorándums de entendimiento para la investigación y desarrollo de la industrialización del litio.
“Hay una cantidad no sólo (de) líneas y productos que se pueden realizar como por ejemplo les puedo decir cátodos, se pueden hacer una variedad de cátodos, no es un solo cátodo, lo mismo con los electrolitos. Las tecnologías de batería son diversas, entonces esto no significa un probable acuerdo con uno de estos países, una de estas empresas, no cierra el camino para otros acuerdos con otras empresas”, aseguró.
Echazú señaló que la posición se debe a la postura marcada por el presidente Evo Morales acerca de evitar monopolios o exclusividades en todos los sectores de la economía.
“Nuestra conducta, la línea que ha marcado el presidente (Evo) Morales, es de evitar monopolios, exclusividades. (Y) vamos a seguir con esa línea no solamente en esta materia, sino en todas las que tienen que ver (con) economía, comercio internacional y relaciones internacionales”, sostuvo.
Convenios. El Gobierno firmó hasta el momento memorándums de entendimiento con Irán, Brasil, Japón, Corea del Sur y China. Estos dos últimos expresaron mayor interés en el tema de la industrialización del litio a diferencia de los demás, señaló Echazú y dijo que “las propuestas coreana y china están avanzando a un paso sostenido”.
Echazú declaró el pasado 6 de abril que China y Corea del Sur se perfilan como los potenciales socios para la tercera fase de industrialización del litio boliviano, que comprende la fabricación de baterías. La “decisión final” será tomada luego de que la Comibol presente las dos propuestas al presidente Evo Morales, añadió.
El proyecto gubernamental de industrialización del Salar de Uyuni comprende tres fases. La primera consiste en la producción de 40 toneladas (t) de carbonato de litio y 1.000 t de cloruro de potasio con una inversión de US$17 millones a fines de este año.
La segunda apuntará a optimizar el proceso de industrialización del boro, magnesio y sulfato, y desarrollar la tecnología necesaria para fabricar baterías. La inversión es de $us 485 millones y la producción anual será de 30.000 t de carbonato y 700.000 t de cloruro. La última fase contempla la fabricación de baterías de litio.
Crédito. Echazú ratificó que para la tercera fase, que consiste en la producción de baterías de litio y cátodos, “el presidente (Evo Morales) ha aprobado en su estrategia un monto de US$400 millones”. El Estado tiene los recursos suficientes para todo el plan, afirmó.
Bolivia y China firman memorándum. El Gobierno boliviano y la empresa estatal china Citic Guoan Group suscribieron ayer un memorándum de entendimiento para realizar actividades de investigación y desarrollo para la industrialización de los recursos evaporíticos del Salar de Uyuni.
El ministro de Minería, José Pimentel, dijo que el acuerdo es el resultado de largas negociaciones sostenidas con la empresa china, el cual se convierte en un paso más para lograr la industrialización del litio del Salar de Uyuni.
“Esta carta de entendimiento con la empresa Citic Guoan Group de la República Popular de China está demostrando que el proyecto de Uyuni tiene amplia repercusión mundial y existe el espíritu de colaboración de la comunidad internacional a nuestro proyecto”, aseguró la autoridad.
Por su parte, el gerente general de la empresa china, Yan Haoyu, expresó la predisposición de compartir la experiencia tecnológica de la factoría con la parte boliviana, la cual se caracteriza en la producción de litio con valor agregado en la región asiática desde cátodos hasta baterías de litio.
“Nuestra empresa está dispuesta dentro del marco de la cooperación entre ambos países poder compartir los éxitos en el proyecto (del Salar) de Uyuni con la parte boliviana”, concluyó Haoyu.