La mayor utilización de fertilizantes y semillas de alta calidad en Argentina se produce en momentos en que, a pesar de las expectativas de una oferta global récord de trigo, se espera una retracción en las reservas del cereal para transformar en harina debido a problemas de calidad en Estados Unidos.
Buenos Aires. El trigo de Argentina mostrará un salto en calidad en la actual campaña 2016/17, aliviando la fuerte demanda mundial del cereal para consumo humano, gracias al crecimiento en inversiones en el cultivo, dijo el lunes el titular de la cámara sectorial Argentrigo.
La mayor utilización de fertilizantes y semillas de alta calidad en Argentina se produce en momentos en que, a pesar de las expectativas de una oferta global récord de trigo, se espera una retracción en las reservas del cereal para transformar en harina debido a problemas de calidad en Estados Unidos.
A las semanas de asumir en diciembre, el presidente argentino Mauricio Macri eliminó impuestos y límites que regían sobre las exportaciones de trigo, una medida muy reclamada por el sector y que despertó un renovado interés por el cultivo.
"Ahora que el Gobierno modificó el marco para el comercio del trigo, los productores están invirtiendo y concentrándose en producir trigo de buena calidad", dijo David Hughes, presidente de Argentrigo.
"El año pasado el trigo se limitaba a sobrevivir", señaló Hughes, que explicó que las regulaciones que aplicó el Gobierno previo redujeron los márgenes de rentabilidad del cultivo y, por lo tanto, el área agrícola dedicada al cereal.
La nueva cosecha debería tener nivel proteico promedio de 12%, contra el 10,4% que se registró en la temporada 2014/15, dijo el titular de Argentrigo respecto al cultivo cuya recolección comienza en los últimos meses del año y finaliza en enero.
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Durante el fin de semana se registraron lluvias en zonas trigueras de Argentina urgidas de agua, lo que sostiene las expectativas del titular de una de las cámaras del cereal del país, un proveedor mundial líder del grano.
El trigo argentino actualmente se encuentra atravesando períodos claves de desarrollo que determinarán la calidad y rendimientos de las plantas cuando sean cosechadas.
"En la actualidad en general no se registran patrones de clima extraordinarios o alarmantes. Por lo general tenemos buenos índices de humedad", dijo Hughes.
La semana pasada la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) estimó la cosecha de trigo 2016/17 en 13 millones de toneladas, por encima de los 10,9 millones recolectados en la campaña previa.
Por su parte, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires prevé una producción de trigo de 12,5 millones de toneladas.
De acuerdo a Hughes, del total recolectado en la campaña 2016/17, entre 5 y 6 millones de toneladas de trigo serían consumidos dentro de Argentina, mientras que cerca de 5 millones de toneladas serían compradas por Brasil.
El resto del trigo disponible sería embarcado a nuevos mercados como otros países de Latinoamérica y naciones del sudeste asiático y África subsahariana, agregó.
"Tenemos que volver a introducirnos al circuito internacional y recordarle a todos que tenemos trigo de alto nivel proteico disponible", señaló Hughes.
