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Chile busca convertirse en un incubador tecnológico internacional
Miércoles, Agosto 4, 2010 - 18:29

Con un poco de capital inicial, Chile busca importar a jóvenes emprendedores en tecnología para alentar la innovación local e intentar convertir al país en un satélite del famoso polo estadounidense Silicon Valley.

Santiago. Con un poco de capital inicial, Chile busca importar a jóvenes emprendedores en tecnología para alentar la innovación local e intentar convertir al país sudamericano en un satélite del famoso polo estadounidense Silicon Valley.

El país espera atraer antes de octubre de este año a 25 empresas emergentes de tecnología mediante Start-Up Chile, un programa piloto que promete romper con la burocracia, ayudar con US$40.000 para gastos y conectar a los innovadores con talentos locales y capitalistas de riesgo.

El presidente Sebastián Piñera, quien forjó su fortuna como un emprendedor de las tarjetas de crédito durante la década de 1980, ha prometido reflotar la alicaída productividad y hacer crecer la economía chilena a un promedio anual de un 6% durante su Gobierno.

El mandatario busca deshacer lo que denomina "falta de una cultura real de innovación y emprendimiento" en el país, con la ayuda de jóvenes innovadores que rechazan oportunidades en Estados Unidos.

Los asesores de Piñera esperan que los extranjeros puedan contagiar a sus pares chilenos mediante la contratación local, el aprendizaje mutuo y ejemplos en terreno, todo a cambio de seis meses de inversión inicial.

"Estuve allí y sé lo que US$40.000 pueden significar para alguien que está totalmente endeudado", dijo Nicolás Shea Carey, un emprendedor chileno que dejó Silicon Valley para dirigir un panel de innovación interministerial sobre innovación.

Buenas condiciones. Sillicon Valley adquirió fama mundial por congregar a algunos de los mayores visionarios de la industria tecnológica.

"Principalmente, uno está trabajando en un ático con un amigo mientras come pizza (...) entonces ¿por qué no mejor ir a Chile a un sitio más cómodo (...)?", dijo Shea Carey.

Uno de los primeros genios informáticos que aceptó la propuesta fue Amit Aharoni, un israelí que busca comenzar con un sitio de internet sobre viajes con su compañero de la Universidad de Stanford, el francés Nicolas Meunier.

"Los emprendedores novatos tienen el problema del huevo y la gallina", dijo Aharoni al explicar la necesidad de capital para poder generar un prototipo para atraer capital.

Aharoni espera poder estar el próximo año de vuelta en California para hacer crecer el negocio, pero si él y Meunier encuentran expertos podrían mantener sus operaciones de desarrollo en la relativamente barata capital chilena.

Mayor atractivo. Más allá de la ayuda con los gastos básicos, Aharoni dijo que el posible acceso a los mejores talentos de la región era el mayor atractivo de Start-Up Chile.

Además de la conveniente zona horaria de Chile, el profesor de Duke Vivek Wadhwa ve el potencial de crear un grupo de innovadores de alto impacto con tan sólo 2 millones de dólares.

"Por primera vez en la historia de Estados Unidos, personas con talentos están dejando el país para hacer de otros lugares su patria. Hasta el momento sólo ha sido un boleto de ida a Estados Unidos (...) ahora están encontrando más oportunidades económicas en otros países", señaló Wadhwa.

Autores

Reuters