Colombia tiene un contrato para venderle al país vecino 150 millones de pies cúbicos diarios y estos días se define si se mantiene.
Estos días vence el plazo para que Venezuela defina si renueva el convenio con Colombia para la importación de 150 millones de pies cúbicos diarios de gas natural, proceso que ya se ha renovado en dos ocasiones, advirtió el ministro de Minas y Energía, Amylkar Acosta. Se refiere a que, con antelación, el compromiso era que primero Colombia le exportaba a Venezuela y una vez el vecino consiguiera reservas, este también le vendería a Colombia con precios razonables.
El funcionario explicó que se están adelantando las conversaciones entre Chevron, Ecopetrol y Pdvsa y que hoy se conocerán los resultados finales para establecer si se amplía el convenio de compra, que vence en junio próximo.
Si Venezuela no da vía libre y no sigue recibiendo el combustible de Colombia, lo que sucedería es que a partir de septiembre de este año el país vecino empezaría a exportar al nuestro a través del gasoducto Antonio Ricaurte, generando un problema de exceso del combustible, pues en el país no se necesita más del que se tiene.
El problema se acentuó hace pocas semanas cuando el ministro de Energía de Venezuela, Rafael Ramírez, anunció que entre los planes de expansión de mercado, su país exportaría a Colombia 300 millones de pies cúbicos de gas, lo que preocupa a la industria porque no se sabe qué hacer con el excedente de este combustible.
Por eso la declaración del ministro Acosta en el III Congreso de Minería a Gran Escala tiene a la expectativa a empresas como Promigás, que cuenta con una participación del 40% de transporte del gas en el país.
A la par, Acosta recordó que se están abriendo nuevas ventanas en explotación de gas, pues de los 97 bloques que se ofertarán en la Ronda Colombia 2014, el ministro señaló que ocho corresponden a gas asociados a los mantos de carbón. El funcionario repitió que está muy cercano un acuerdo entre Drummond y Cerrejón para la explotación de este combustible.
Por su parte, el presidente Juan Manuel Santos anunció que mantendrá su apoyo a la minería a gran escala por considerar que es un gran aliado para el país, ya que en 2012 la actividad aportó $31 billones (US$15.158 millones) al desarrollo de Colombia.
El mandatario retomó una aspiración del sector minero y anunció que este año postularán a Colombia a la Iniciativa de Transparencia de las Industrias Extractivas (EITI), por sus siglas en inglés, lo que le permitirá una mayor claridad en cómo se invierten los recursos que giran las empresas por concepto de regalías.
Santos recalcó que esto permitirá que se mantenga el interés en el país y que prueba de ello es el crecimiento de la inversión extranjera, la cual pasó de US$15.800 millones en 2012 a US$16.833 millones en 2013.
Frente a este tema el presidente de Fedesarrollo, Leonardo Villar, señaló que puede ser útil para hacer seguimiento de los recursos que pagan las compañías al gobierno. El dirigente mostró su preocupación por la caída en el valor de las exportaciones de los commodities al pasar de US$12.193 millones en 2012 a US$9.720 millones en 2013, situación que prende las alarmas en la economía nacional. A esto se suma la caída de la inversión extranjera directa, a pesar de que se mantiene el interés por el país.
Entre tanto, el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas Santamaría, agregó que el país debe crecer a una tasa del 6% cada año y que para que esto sea posible el sector de la minería debe hacerlo al 8%. “La caída de los ingresos en el sector minero-energético en 2013 fue compensada por el dinamismo de la construcción y esto es bueno, pero lo indicado es que la locomotora minera retome su velocidad”.