Se estima que la próxima semana se conocerá el nombre de la firma internacional a la que se le adjudica la licitación privada para atender las filtraciones que existen en la principal hidroeléctrica de Honduras.

El informe final del comité técnico que evalúa las ofertas presentadas por tres empresas para realizar las reparaciones en la hidroeléctrica “El Cajón” será entregado esta semana al gerente de la ENEE, Emil Hawit.

En este sentido, se estima que la próxima semana se conocerá el nombre de la firma internacional a la que se le adjudica la licitación privada para atender las filtraciones que existen en la principal hidroeléctrica de Honduras.

La información la brindó el subgerente técnico, Leonardo Deras, quien expresó que lo más seguro es que en las próxima semanas el gerente de la ENEE, Emil Hawit, convoque los miembros de la junta directiva de la estatal eléctrica para conocer el informe y proceder a la adjudicación de estas obras a una de las tres empresas que participan en este proceso.

Antes de Semana Santa se conoció el resultado de las ofertas económicas presentadas con anterioridad, sin embargo, la comisión tenía que realizar una revisión por ley del estatus del pago de los impuestos de estas firmas y de manera adicional, los errores aritméticos que pudieran contener estas ofertas. “Estos temas se encuentran en secretividad y en este momento no se conoce cuál es el cómputo final.

Los resultados de la evaluación de las ofertas se sabrán cuando sea presentados a la junta directiva, que lo deberá dar por aprobado y luego podrá ser conocido porque es de carácter público”, dijo.

El Heraldo constató que en “El Cajón” existen filtraciones a razón de 1.000 litros por segundo. En el estribo derecho de la central hay una fuga que supera los 420 litros por segundo, la cual, se encuentra muy cerca de la casa de máquinas de la central en donde se encuentra las cuatro turbinas, los transformadores y equipos especializados en el proceso de generación de energía eléctrica.

Autoridades de esta central expresaron a El Heraldo que el riesgo es que al ocurrir un nuevo sismo se eleve de manera abrupta el bajo nivel de la central, se incremente el caudal y se inunde la casa de máquinas.