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Consumo de energía se incrementa en Venezuela y toca límite de capacidad de transmisión
Miércoles, Noviembre 17, 2010 - 08:59

Las cifras de la Oficina de Operaciones de Sistemas Interconectados (Opsis) muestran que la demanda máxima de potencia ha comenzado a repuntar. Entre agosto y lo que va de noviembre ha crecido de unos 15.000 megavatios a 16.155 megavatios.

A pesar de que la crisis eléctrica en Venezuela no termina de tocar fondo, el consumo a escala nacional comienza a incrementarse de manera sustantiva y evidencia marcadamente la precariedad del sistema de transmisión y distribución, dadas las continuas interrupciones en el servicio.

Estas limitaciones darán al traste con la intención que tiene el Ejecutivo Nacional de reactivar la economía, dado que la posibilidad de una mayor demanda se verá limitada por la vulnerabilidad de la transmisión. "El aparato productivo nacional tiene un techo en su demanda", comentó el analista en materia eléctrica y profesor universitario, José Manuel Aller.

Las cifras de la Oficina de Operaciones de Sistemas Interconectados (Opsis) muestran que la demanda máxima de potencia ha comenzado a repuntar. Entre agosto y lo que va de noviembre ha crecido de unos 15.000 megavatios a 16.155 megavatios.

José Manuel Aller, sostiene que la reactivación económica propia de la temporada pre decembrina está presionando el mayor consumo de energía eléctrica.

Comenta el experto que la demanda fue contraída de manera artificial para enfrentar la crisis del sector. Sin embargo, las empresas en esta época se preparan para disponer de productos a fin de año. Considera que desde el inicio de clases se ha comenzado a percibir el aumento en la demanda eléctrica, que se contrae nuevamente hacia mediados de diciembre y se extiende hasta febrero cuando, normalmente se recupera el aparato productivo.

De hecho el informe del Banco Central de Venezuela, destaca que la desaceleración en la caída del PIB no petrolero tiene mucho que ver con "la mayor disponibilidad de bienes de origen importado, el aumento en la disponibilidad de energía eléctrica y la recuperación de la demanda agregada interna".

Aller, sin embargo, reconoce que el consumo de electricidad está aun por debajo de lo que se consumió en años anteriores, cuando se rozaron los 18.000 megavatios, inclusive se mantiene aún por debajo de la demandada en 2009, cuando superó 16.700 megavatios.

La posibilidad de que se incremente la demanda eléctrica luce complicado. El deterioro de los sistemas de transmisión y distribución impiden un envío mayor de potencia, al tiempo que el parque termoeléctrico muestra a diario la vulnerabilidad de su estado.

El limite de demanda del sistema está, según el experto, por debajo de 16.000 megavatios, y el consumo ya está excediendo ese rango. "Si la infraestructura eléctrica estuviese en un estado razonable la demanda en los actuales momentos tendría que girar entre los 18.000 a 19.000 megavatios", precisa Aller.

Analistas advierten que esta situación, que limita sustantivamente el consumo dará al traste con cualquier intención de reactivar el aparato productivo a plena capacidad.

Sin embargo, las paradojas existen. Venezuela lejos de retroceder como el país de mayor demanda de electricidad en la región, se mantiene a la cabeza desde 1995, y todas las proyecciones sugieren que se mantendrá este y el año próximo.

Aunque este estatus pudiera sonar como un logro, no lo es. Para Aller es simplemente el uso ineficiente de la energía en el país. Pues Brasil, Argentina y Chile cuyos aparatos productivos son tres veces mayor sus consumos de electricidad son muy inferiores a los de Venezuela.

Guerra de cifras. Según los cálculos del Ejecutivo Nacional el problema de generación de electricidad ha sido suficientemente solventado, no sólo con la recuperación de los niveles del embalse Guri, sino con la incorporación de más de 1.600 megavatios de generación termoeléctrica.

Sin embargo, los números que manejan analistas del entorno señalan que la generación está muy por debajo de lo que el Gobierno señala.

Para muestra un botón, sostiene Aller que la planta Josefa Joaquina Sánchez, comúnmente conocida como Planta Tacoa, es uno de los pilares fundamentales de la capacidad instalada de generación que alimenta a la Región Capital, por lo que la paralización total de sus instalaciones es "verdaderamente preocupante", al tiempo que reeditar una Planta Centro, con Tacoa sería fatal para Caracas.

"El racionamiento por lo tanto suena lógico, pues de no hacerlo el sistema no podría responder", dice Aller.

La preocupación sobre el persistente déficit en la generación es sustentada por el analista, José Aguilar, con cifras oficiales.

Aguilar sostiene que la indisponibilidad de potencia del sistema eléctrico se ubica en el orden de 41,08%, lo que supone que cerca de 10.103 megavatios están inactivos por diversas causas, y en su mayoría por deterioro de la infraestructura.

Recuerda el analista que la capacidad instalada nominal del país gira en torno a 25.000 megavatios.

La triada eléctrica: generanción, transmisión y distribución, debe ir acompasada, toda vez que una complementa a la otra, de desfasarse ocurre lo que ha pasado en el país, sostiene analistas.

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