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Costo del petróleo cayó 10% en Uruguay pero gobierno descartó ajuste de nafta
Domingo, Enero 3, 2016 - 09:31

El director de la oposición en ANCAP dice que hay margen para bajar al menos un 6%

Montevideo. E el margen o la ilusión que existía en los uruguayos para ver una rebaja de los combustibles a principios de enero antes de salir de vacaciones terminó por derrumbarse cuando los ministros de Industria, Carolina Cosse, y Economía, Danilo Astori, anunciaron -en el marco del plan para capitalizar a intervenir la gestión de ANCAP- que no estaban en los planes del gobierno introducir cambios en las tarifas de las naftas en el corto plazo. Esto pese a que el crudo en pesos para la empresa cerró el trimestre octubre-diciembre 10% por abajo de su paramétrica de costos. En tanto, si se toma el último día de diciembre, el petróleo estaba 27% por debajo de la referencia de ANCAP.

Pese a estos datos, el ministro Astori es incluso partidario de aplicar una suba en las tarifas de los combustibles con un ajuste del Impuesto Específico Interno (Imesi) del orden de 9% para apuntalar a la capitalización de unos US$ 622 millones que hace Economía en ANCAP por la condonación de una deuda, según lo establece la ley que aprobó anoche el Parlamento (ver páginas 2 y 3). Cada litro de nafta Súper que hoy cuesta $ 42,5 al público está gravada con 45% de Imesi que equivale a $ 19.

Sin embargo, según consignó el semanario Búsqueda, en la reunión que se desarrollo al más alto nivel de gobierno en la Torre Ejecutiva para encontrar una salida a la crisis del ente petrolero, el presidente de la República, Tabaré Vázquez, descartó una suba en las tarifas de los combustibles porque sería un "error político".

El vicepresidente de ANCAP, Ruben Barboza, declaró a El Obervador que en los próximos días estaba previsto una "actualización" de la paramétrica de costos de la empresa que, entre otros elementos, incorporará a los biocombustibles. Hasta ahora, esa variable no formaba parte de la discusión trimestral de ajuste de tarifas que realiza el ente junto a los ministerios de Industria y Economía. El jerarca aseguró que la empresa no tenía instrucciones tanto para aplicar una baja como una suba.

A todo esto, el pasado martes Astori volvió a plantearle a Vázquez en otro encuentro la necesidad de ajustar las tarifas de los combustibles en enero para cubrir el sobrecosto que tendrá la refinería de La Teja por sus tareas de mantenimiento, pero el presidente se mantuvo es u postura inicial y descartó una suba de las tarifas a partir de enero, según consignó Búsqueda.

Las principales gremiales del país vienen reclamando hace varios meses al Poder Ejecutivo una rebaja en las tarifas de los combustibles para mitigar la desaceleración de la actividad económica y la suba de costos internos frente a otros competidores. Sin embargo, todo indica que ese planteo no podrá atenderse en el corto plazo.

En el último ajuste a la baja de 2,3% en promedio de octubre, ANCAP fijó como referencia para el trimestre final de 2015 un crudo Brent a US$ 50,3 y un dólar a $ 29,61. Según cálculos de El Observador, el barril en pesos para ANCAP en el último día de diciembre estaba 27% por debajo de su paramétrica de costos. En tanto, en el promedio del trimestre octubre-diciembre, el crudo fue 10% más barato que la referencia del ente.

El director del Partido Nacional en ANCAP, Diego Labat, dijo a El Observador que las tarifas podrían bajar al menos un 6% a partir de enero. En ese sentido, explicó que durante el cuarto trimestre de 2015 la diferencia entre el costo real de ANCAP y la paramétrica arroja un saldo a favor del ente de US$ 27 millones.

El petróleo Brent retrocedía esta semana en torno a mínimos de 11 años, en medio de abundantes suministros en EEUU y el compromiso de Arabia Saudita de seguir produciendo crudo (ver nota aparte). Operaba con mermas de un 3% a US$ 36,7 por barril, a menos de US$ 1 de mínimos de 11 años vistos la semana pasada. Los precios del crudo han perdido más de 60% de su valor desde mediados del 2014 debido a que un aumento en la producción en la Organización de Países Exportadores de Petróleo, Rusia y EEUU alentó un superávit global de suministros de entre medio millón y 2 millones de barriles por día.

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