El petróleo también encontró soporte en el débil dato de Producto Interno Bruto de Estados Unidos, que encendió esperanzas de que la Reserva Federal podría desacelerar su ritmo planeado de alza de tasas.
Nueva York. Los precios del petróleo subieron el viernes, para registrar un rebote de más de un 25 por ciento desde los mínimos en 12 años tocados la semana pasada y recortar las pérdidas en el mes, en medio de perspectivas de un acuerdo entre los principales productores para recortar suministros y reducir la excesiva oferta.
El petróleo también encontró soporte en el débil dato de Producto Interno Bruto de Estados Unidos, que encendió esperanzas de que la Reserva Federal podría desacelerar su ritmo planeado de alza de tasas.
Los precios del crudo extendieron su repunte por cuarta sesión consecutiva esta semana después de que los renovados pedidos de la Organización de Países Exportadores de Petróleo a otros productores para que recorten el suministro junto a sus miembros disparó una serie de comentarios de Rusia sobre un acuerdo con la OPEP, algo a lo que se ha negado durante 15 años.
Los futuros del crudo Brent para marzo -contrato que expiró el viernes- cerró a 34,74 dólares por barril, un alza de 85 centavos o un 2,5 por ciento. El 20 de enero había tocado 27,10 dólares, su mínimo desde noviembre del 2003.
El petróleo referencial estadounidense subió 40 centavos, o un 1,2 por ciento, y cerró a 33,62 dólares el barril, tras tocar más temprano un máximo a 34,40 dólares.
En la semana, el Brent ganó un 7,9 por ciento y el referencial estadounidense subió un 4,4 por ciento, recortando sus pérdidas mensuales a 6,8 y 9,3 por ciento, respectivamente.
La jornada fue volátil, y ambos contratos pasaron a terreno negativo momentáneamente después de que el diario Wall Street Journal citó a un funcionario iraní diciendo que el país no se uniría en lo inmediato a un recorte de la producción de la OPEP.
El viceprimer ministro ruso, Arkady Dvorkovich, dijo el viernes que el Estado no intervendrá para equilibrar el mercado. Sus comentarios alimentaron las crecientes dudas sobre un posible acuerdo mencionado en la víspera por el ministro de Energía Alexander Novak.