Está previsto que a las granjas ya existentes en las provincias de La Habana y Granma se sumen otras seis en diferentes regiones, con el objetivo de comercializar los productos en el mercado local y en frontera.

La Habana. La crianza del avestruz es considerada como la más reciente adquisición de la ganadería en Cuba, donde se incrementarán las granjas para esa actividad y se prevé lograr su pleno desarrollo en 2018, con vistas al comercio local y la exportación.

La isla ya tiene “resultados excelentes” de un programa para el desarrollo de esas aves, que impulsa la Empresa Nacional de Flora y Fauna con la colaboración de la Agencia Española para la Cooperación Internacional y el Desarrollo (Aecid).

Está previsto que a las granjas ya existentes en las provincias de La Habana y Granma se sumen otras seis en diferentes regiones del país, con el objetivo de comercializar los productos del avestruz en el mercado local y en frontera, según la publicación.

La actividad, que se espera alcance el pleno desarrollo a partir de 2018, será un factor importante en la diversificación de la economía cubana, con un previsto aporte a la elevación paulatina del nivel de vida de la población, indicó el reporte.

En ese sentido, afirmó que la crianza de esas aves aventaja en varios aspectos a otras actividades porque son animales que se reproducen prolíficamente y de los cuales se aprovecha todo.

Además, citó otras ventajas como la creación de nuevas opciones de empleo y la posibilidad de diversificar las fuentes de alimento para la población y el turismo.

En 1997 el Centro Nacional para la Producción de Animales de Laboratorio de Cuba importó desde México los primeros ejemplares de avestruz seleccionados para formar una cría nacional.

De ese modo, entraron a la isla ejemplares de las subespecies de cuello azul, rojo y negros africanos, tras cuyo cruzamiento aparecieron los llamados reproductores híbridos F1, F2 y F3, que actualmente se explotan en el país.

Las aves fueron introducidas como parte de un programa de diversificación para obtener alimentos sanos y crear nuevos renglones exportables, y en 2007 aparecieron las primeras granjas comerciales.

Cuba ya tiene experiencia en el manejo de otras especies exóticas como los búfalos, introducidos en la isla hace dos décadas por las ventajas de su explotación con respecto de las vacas.

Datos oficiales indican que la ganadería cubana decreció un 11,6% entre enero y marzo de este año con respecto de igual trimestre del 2011, con perjuicios en áreas como el sacrificio de ganado y la producción de leche.

La ganadería se incluye entre los renglones a desarrollar dentro de las directrices agrícolas del plan de ajustes económicos que impulsa el gobierno de Raúl Castro.