San Luis, junto a San Juan y Martínez, Guane y el municipio de Pinar del Río, conforman la región de Vueltabajo, territorio que combina suelos idóneos para el tabaco y una centenaria cultura agrícola e industrial.
La Habana. Agricultores cubanos comenzaron la siembra de 140 hectáreas de tabaco Virginia, como parte de un proyecto para el rescate de ese cultivo en la occidental provincia de Pinar del Río.
La directora adjunta de la Empresa de Acopio y Beneficio de Tabaco en el municipio de San Luis, Andrea Méndez, citada hoy por la prensa local, anunció que después de esa siembra se incrementarán las áreas, de modo que en la cosecha 2018- 2019 llegarán a 200 hectáreas, y en la siguiente, a 317.
San Luis, junto a San Juan y Martínez, Guane y el municipio de Pinar del Río, conforman la región de Vueltabajo, territorio que combina suelos idóneos para el tabaco y una centenaria cultura agrícola e industrial.
Méndez señaló que se espera un rendimiento de 1,5 toneladas por hectárea, a partir de la introducción de nuevas variedades, cuyo logro depende de la disponibilidad de semillas, pues la siembra del tabaco rubio fue abandonada en determinado momento por los agricultores.
El proyecto responde a la necesidad de abastecer con materias primas a una nueva fábrica de cigarrillos que se montará en la Zona Especial de Desarrollo de Mariel, ubicada unos 45 kilómetros al oeste de La Habana.
Caracterizado por su proliferación en suelos de baja fertilidad y donde tienen lugar pocas precipitaciones, el cultivo del tabaco Virginia comenzó en Cuba en la década de 1930, en la llanura más occidental de Vueltabajo.
Mezclado con el tabaco Burley, el Virginia es empleado en la elaboración de cigarrillos suaves, dotados de un aroma y sabor peculiares.
La isla emplea a unas 150.000 personas en la cosecha tabacalera, aunque esa cifra puede aumentar hasta un cuarto de millón en los momentos más complicados de un sector que aporta unos 450 millones de dólares cada año.
