Gracias al alto costo del petróleo, el etanol a base de maíz tiene un precio atractivo. La producción y las exportaciones están en niveles récord este año y una ley estadounidense garantiza a los combustibles renovables un lugar en el mercado de combustibles para motores.
Un crédito impositivo para el etanol en Estados Unidos, que cuesta unos US$6.000 millones por año, terminará el 31 de diciembre, ante declaraciones de que la industria estadounidense podrá valerse por sí misma y esperanzas de Brasil sobre una bonanza en biocombustibles en los próximos años.
Gracias al alto costo del petróleo, el etanol a base de maíz tiene un precio atractivo. La producción y las exportaciones están en niveles récord este año y una ley estadounidense garantiza a los combustibles renovables un lugar en el mercado de combustibles para motores.
"Nuestra gente tiene mucha confianza en esta idea: producimos el combustible más barato del planeta", dijo este miércoles Tom Buis, jefe de Growth Energy, un organismo de la industria estadounidense.
Para el futuro, los productores de etanol se centran en promover una mayor mezcla de etanol en la gasolina, la instalación de bombas "mezcladoras" para dispensar mezclas más elevadas, y una mayor producción de vehículos de combustible flexible.
"Yo esperaría un crecimiento continuo", dijo Bob Dinneen, de la Asociación de Combustibles Renovables, otro organismo de la industria en Estados Unidos.
A fin de año vence un arancel a la importación de etanol de 54 centavos por galón, al igual que un crédito impositivo de 45 centavos por galón.
La Unión de la Industria de Caña de Azúcar (Unica) de Brasil, cuyos miembros también producen etanol, dice que la eliminación del arancel abrirá el mercado estadounidense e impulsará el crecimiento a largo plazo para el etanol brasileño.
"Esto nos dará las condiciones adecuadas para invertir en la expansión de las procesadoras existentes e invertir en las 130 nuevas que creemos que necesitaremos para duplicar nuestra producción en 10 años", dijo el presidente de Unica, Marcos Jank.
En este momento, el etanol brasileño se vende a una prima para el uso en California, donde se reconoce que tiene una menor marca de carbono que el etanol estadounidense. Pero Brasil importa etanol de Estados Unidos debido al estrecho suministro doméstico.
Estados Unidos es el principal productor mundial de etanol, con una producción estimada en 52.000 millones de litros este año, y Brasil es el segundo.
Las mayores productoras estadounidenses son Poet, Archer Daniels Midland Co y Valero Energy Corp.
La primera vez que el Congreso estadounidense ofreció un alivio fiscal al etanol fue en 1979, cuando el combustible ganó en popularidad como una respuesta local a los embargos petroleros árabes.
Además, durante años el combustible renovable ha sido un producto favorito de las zonas agrícolas de Estados Unidos por su capacidad para crear empleos y funcionar como sostén de los precios de los granos.
