Se trata de una buena noticia para la industria del ron puertorriqueño, que pretende recuperar importancia en la delicada economía de una isla que antaño tenía en la caña de azúcar una de sus principales fuentes de ingreso.
San Juan. El fabricante del ron puertorriqueño Don Q, entre otras marcas, Destilería Serrallés, anunció este martes que ha llegado a acuerdos con compañías estadounidenses que le permitirán aumentar su producción local en cerca de 75% durante los próximos tres años.
Se trata de una buena noticia para la industria del ron puertorriqueño, que pretende recuperar importancia en la delicada economía de una isla que antaño tenía en la caña de azúcar una de sus principales fuentes de ingreso.
"Nuestra producción actual ronda los 4,5 millones de galones (20 millones de litros) y con estos nuevos acuerdos esperamos alcanzar los 8 millones (36 millones de litros) en un plazo de tres años", explicó la vicepresidenta senior de manufactura de la Destilería Serrallés, Silvia Santiago.
Esta destilería es la responsable de la manufactura de los rones Don Q en todas sus variantes, así como del Ron Palo Viejo, Ron Granado, Ron Llave, Ron Rico, Ginebra Calvert y Vodka Nikolai, a la vez que distribuye otras bebidas, entre ellas, numerosos vinos españoles.
"Además de para nuestros propios productos, algo más de la mitad de la producción actual (2,5 millones de galones) se vende como ron base a empresas de EE.UU. que luego ellas comercializan bajo su propia marca de ron o de otros licores y mezclas", explicó Santiago.
Destilería Serrallés anunció este martes que ha cerrado nuevos acuerdos para aumentar esa exportación de ron base, al que no se puede llamar "ron de Puerto Rico" porque no está envejecido durante al menos un año, tal y como exige la ley.
Sin embargo, las firmas estadounidenses sí pueden citar en sus etiquetas que las bebidas están hechas con ron fermentado y destilado en Puerto Rico.
Así, todo el aumento de la producción anunciado este martes se destinará a elaborar ron base para su exportación, que "en 99% va a EE.UU.", explicó Santiago.
De la parte que la compañía se reserva para elaborar su propio ron, cerca del 85% se comercializa en Puerto Rico, donde el consumo de esta bebida está muy extendido, mientras que el 15% restante se exporta.
El negocio de Serrallés sufrió un duro golpe cuando en 2011 Diageo se llevó su producción de Captain Morgan a Islas Vírgenes, atraída por un subsidio cercano al 50% de sus gastos para la producción y una planta valorada en US$200 millones.
Aquella migración por parte de la mayor firma de bebidas alcohólicas del mundo supuso además la pérdida de más de un centenar de millones de dólares al año en ingresos para las arcas de Puerto Rico por el reembolso federal de impuestos al ron boricua.
"Cuando se perdió el contrato con Diageo la producción se quedó en cerca de 3 millones de galones, pero poco a poco se ha ido recuperando y ahora estamos en torno a los 4,5. Nuestra idea es llegar a 8 millones en tres años", explicó Santiago.
En este sentido, comentó que un factor clave para atraer el interés de las empresas de EE.UU. ha sido el proyecto que se ha puesto en marcha para recuperar la producción de la melaza de caña en la isla.
Para ello, la compañía se ha aliado con el gobierno de Puerto Rico con el objetivo de volver a sembrar caña en terrenos públicos y producir melaza local, ya que ahora toda se compra en República Dominicana y Guatemala.
"El hecho de que podamos volver a controlar nosotros todas las etapas, incluida la producción de la materia prima, ha despertado un gran interés entre las compañías estadounidenses", explicó Santiago, quien detalló que existe un acuerdo de confidencialidad para no desvelar los nombres de esas empresas.
Para que se empiecen a observar los frutos de esta iniciativa aún habrá que esperar algunos años y de momento la producción será poco representativa, pero "la idea es hacer lo necesario para que algún día podamos producir en Puerto Rico toda la melaza que necesitamos".
El ron producido en Puerto Rico es el que más se vende en EE.UU., un mercado que absorbe el 70% de los 35 millones de galones (160 millones de litros) que se producen anualmente en la isla con destilerías que fabrican marcas tan conocidas como Bacardi, Don Q, Barrilito o Trigo.
El anuncio de hoy tuvo lugar en la sede de la destilería, en Ponce (la segunda mayor localidad de Puerto Rico), en una rueda de prensa encabezada por el gobernador de la isla, Alejandro García Padilla.
El gobernador quiso destacar que estos acuerdos elevarán los ingresos logrados por la parte de los impuestos que se pagan en EE.UU. por la venta de ron boricua y que luego se reembolsan a la isla.
El ron aporta unos 400 millones de dólares anuales a las arcas de Puerto Rico, de los que Destilería Serrallés contribuye con 37 millones, según datos de la Compañía local de Fomento Industrial (Pridco).