“Lo que hay es la gente (que) no puede acceder a esos alimentos sea porque los precios están elevados, sea porque el nivel de empleo, de salario no le permite comprar esos productos”, dijo el director general electo de la FAO, Graziano da Silva.

La Paz. La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) informó que en Bolivia no hay inseguridad alimentaria, sino que los alimentos registran precios altos que hacen que los bolivianos no puedan acceder a ellos por los bajos ingresos que poseen.

Así lo explicó el director general electo de la FAO, Graziano da Silva, quien sugirió incrementar la producción de alimentos para provocar una rebaja en sus precios, porque el país sudamericano cuenta con tierras y agua a diferencia de otras regiones vecinas, y hacer uso de la tecnología “que no (lo) está desarrollando hoy día”.

“Lo que hay es la gente (que) no puede acceder a esos alimentos sea porque los precios están elevados, sea porque el nivel de empleo, de salario no le permite comprar esos productos. Entonces no es que falta alimentos (sino) falta poder adquisitivo en la gente para poder comprarlos”.

El ministro de Economía, Luis Arce Catacora, dijo el 18 de noviembre del 2010 que el incremento de los precios de los alimentos en el mercado interno no es a causa de las políticas económicas que aplica el Gobierno, sino que se debe a una inflación importada de los valores a nivel internacional.

Precios. Graziano anunció que según estudios realizados por la FAO, los precios de los alimentos por los próximos “cuatro o cinco años seguirán elevados y muy volátiles”. Luego de este tiempo se estabilizarán pero no bajarán por debajo de los valores establecidos entre los años 2006 y 2007. “Serán años de precios elevados”, dijo.

“Vamos a tener que aprender a convivir con precios más elevados de alimentos y eso implica mejores salarios, mejorar la distribución de ingresos (…) que creo que el mundo está preparado para enfrentarlo”, afirmó.

El representante de la FAO insistió que en Bolivia no existe un problema de inseguridad alimentaria por el lado de la producción, sino por los valores de los alimentos y sugirió aplicar dos medidas para superar el problema.

La primera sugerencia está relacionada al aumento en la producción para bajar los precios, y la segunda es una mejora en la distribución de los ingresos y tener programas de cobertura social que permita transferir recursos a los más pobres, “por ejemplo los planes de transferencia de ingresos condicionados que se han aplicado hoy día en América Latina”.

Da Silva realizó dichas declaraciones luego de la reunión que sostuvo con la ministra de Desarrollo Rural y Tierras, Nemesia Achacollo, y con el presidente de la Cámara de Industria, Comercio, Servicios y Turismo de Santa Cruz (Cainco), Luis Barbery.

A su vez, la ministra Achacollo señaló que con el apoyo de la FAO y el sector privado como la Cainco se logrará diseñar de forma conjunta una política para garantizar el aumento de la producción de alimentos en el país.

Se plantean sugerencias. Da Silva recomendó que la información sobre los precios, la producción y el stock sea disponible para todos. Pidió a la población sustituir los alimentos caros.

Cainco ve contradicción en políticas del gobierno

El presidente de la Cámara de Industria, Comercio, Servicios y Turismo (Cainco) de Santa Cruz, Luis Barbery, lamentó que existan contradicciones al interior del gobierno, porque mientras unos quieren impulsar el aumento de la producción de alimentos, otros buscan reducir la frontera agrícola en el país.

“Precisamente (hay) descoordinaciones internas a nivel incluso del gobierno donde, por un lado, se quiere impulsar la producción de alimentos y, por el otro, se tiene reparticiones que por ahí están favoreciendo más bien la reforestación de las tierras agrícolas, o sea, reducir la frontera agrícola. Ahí hay una contradicción”.

Barbery dijo que si el gobierno proyecta una nueva Ley INRA que garantice la seguridad jurídica, lo apoyarán, “pero debe resolver primero su contradicción”. La ministra de Desarrollo Rural y Tierras, Nemesia Achacollo, respondió que el gobierno “tiene la obligación de dar seguridad jurídica al sector productor que hoy día está invirtiendo en el país”.

Las regiones deben apoyar la producción. El viceministro de Planificación y Coordinación, Flavio Rivas, explicó que en el nuevo Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social los municipios y gobernaciones deberán incorporar en sus presupuestos recursos para hacer frente a los impactos del cambio climático y así garantizar la seguridad alimentaria.

“Si ya sabemos que en determinados municipios recurrentemente caen heladas, inundaciones o son susceptibles de ciertos riesgos climáticos, y que esas áreas son de producción intensiva o de producción extensiva, debemos incorporar en la planificación nacional —principalmente de las gobernaciones y municipios— componentes que nos permitan paliar el impacto”, precisó.

Rivas explicó que se busca que los municipios no consideren la gestión de riesgos como un gasto sino como una inversión, porque tomando previsiones se puede invertir menos que en una reconstrucción. A modo de ejemplo dijo que en caso de que se registre una helada en un área productiva, el municipio debería instalar unos silos para almacenar alimentos.

El nuevo Plan de Desarrollo Económico y Social que implementará el gobierno desde el 2012 hasta el 2015 consta de cinco pilares: Patria unida con la nueva Constitución, Patria grande e industrial en la era satelital, Patria fuerte con producción y empleo, Patria segura, patria para todos y Patria libre, símbolo mundial.