Con esta adquisición, Coca Cola, junto a embotelladoras Andina y Embonor, compartirán en supermercados el mercado de las aguas saborizadas y del néctar, lo que generará un aumento en la participación de la compañía en este último sector.

Santiago. La compra por parte de Coca Cola de la marca Novaverde, es decir Guallarauco, propiedad del Grupo Angelini, recibió luz verde por parte de la Fiscalía Nacional Económica.

Con ello, el trato podría cerrarse de manera oficial antes que termine 2018, lo que involucrará el pago total de $45.000 millones (US$68,4 millones) a través de Inversiones Siemel.

De esta manera, Coca Cola, junto a embotelladoras Andina y Embonor, compartirán en supermercados el mercado de las aguas saborizadas y del néctar, lo que generará un aumento en la participación de la compañía en este último sector.

Según consignó Diario Financiero, Coca Cola podría pasar a dominar entre el 1% y 5% de éste, cifra que no fue precisada de manera exacta por el órgano fiscalizador debido a materias de confidencialidad.

De acuerdo a la Fiscalía, la compra no significará una reducción en la competencia por el néctar entre ambas firmas, ya que los productos de Guallarauco atraen a segmentos socioeconómicos más altos que los de Andina del Valle, muchos menos si se tiene en cuenta que el real dominio lo tienen Watts’ y CCU.

Así, la familia Piwonka debe vender el 33% de Nonaverde a Siemel, con lo que dejará de lado el negocio del néctar, pero mantendrá su participación en el mundo de las paltas y el de los helados.