El alza en los impuestos cobrados a esta industria y la baja generalizada de los precios de los minerales, ha llevado a una caída en la competitividad existente en el sector.

ElEconomista.com.mx. La Secretaría de Economía buscará revertir la actual caída en las inversiones y en la competitividad del sector minero de México, influenciada por el alza en los impuestos cobrados a esta industria y la baja generalizada de los precios de los minerales.

Humberto Gutiérrez, presidente de la Cámara Minera de México (Camimex), estimó que la inversión en el sector mostrará una tendencia a la baja a nivel nacional y se anticipa que por los mayores impuestos haya un descenso del país en un indicador de la consultoría Behre Dolbear sobre el ambiente para los negocios mineros.

El Programa de Desarrollo Minero (Prodemin) 2013-2018 plantea cuatro objetivos: promover mayores niveles de inversión y competitividad en el sector minero; aumentar el financiamiento; fomentar el desarrollo de la pequeña y mediana minería, y modernizar la normatividad.

El gobierno federal se fijó como primera meta cuantificable incrementar la calificación de 43.1 en el 2013 a 45.0 en el 2018, en el reporte “Ranking of Countries for Mining Investment”, elaborado por la firma Behre Dolbear Group, con sede en Estados Unidos, fundada en 1911 y con oficinas en ocho países.

“(Esta meta) tiene como objetivo mantener el posicionamiento competitivo de México para la atracción de inversión al sector minero, tanto a nivel mundial como en América Latina, considerando el impacto que tendrán las modificaciones al régimen fiscal en la evaluación de las condiciones que ofrece nuestro país”, dijo la Secretaría de Economía.

En el 2013, México se ubicó en la posición quinta en el reporte de Behre Dolbear, y los analistas estiman que el país tendrá una caída en la clasificación para el presente año.

La empresa Behre Dolbear califica las jurisdicciones mineras con un máximo de 70 puntos, tomando en cuenta siete variables: sistema político, sistema económico, grado de afectación que experimenta la actividad minera por problemas sociales, retrasos en la recepción de los permisos, grado de corrupción, estabilidad de la moneda y competitividad tributaria.

En el Prodemin se pretende incrementar los créditos directos otorgados para financiar actividades mineras, de 318 millones de pesos (US$24,6 millones) en el 2013 a 825 millones de pesos (US$63,9 millones) en el 2018.

Como parte del programa y con el objetivo de identificar blancos de exploración minera, el Servicio Geológico Mexicano (SGM) planea elevar el cubrimiento cartográfico 1:50,000, de 702.717 kilómetros cuadrados acumulados hasta diciembre del 2013 (35.8% de avance del territorio nacional) a 877.717 kilómetros cuadrados en el 2018 (44,8%). Otro objetivo es que el financiamiento al sector derivado de los programas federales en materia de garantías se incrementará desde la línea base de 117 millones de pesos (US$9 millones) en el 2013 hasta acumular 750 millones (US$58,1 millones) en el 2018.

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