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Gobierno peruano endurece posición para frenar conflictos mineros
Miércoles, Mayo 30, 2012 - 18:31

Los conflictos, que suman casi 250 en todo Perú, amenazan con frenar más proyectos en un sector que espera inversiones por US$53.000 millones en los próximos años.

Lima. El gobierno peruano endureció su posición para frenar los conflictos mineros que afectan al principal sector económico de Perú, tras capturar este miércoles a la autoridad que lideró una violenta protesta contra la transnacional Xstrata en el sur del país.

Pobladores de la provincia de Espinar, en los Andes de Perú, reclaman a la mina Tintata de Xstrata, la cuarta productora local de cobre, un mayor aporte económico y social para la zona y la acusan de contaminar el medio ambiente.

Los choques con las fuerzas de seguridad dejaron dos muertos y decenas de heridos esta semana.

Según fuentes policiales, a la captura del alcalde de la provincia de Espinar, Oscar Mollehuanca, se suma el arresto de al menos otras 26 personas acusadas de fomentar la violencia pese a que el gobierno autorizó el uso de la fuerza militar en un intento por contener las protestas en esa zona de la región del Cusco.

"Que lamentable situación, lamentable", dijo el presidente de la región del Cusco, Jorge Acurio, quien se había reunido minutos antes con Mollehuanca para coordinar un diálogo con representantes del gobierno en busca del fin del conflicto.

"Nadie puede hablar acá por el temor de que sean detenidos", agregó Acurio en una entrevista desde Espinar con la estación de televisión local Canal N.

El arresto de Mollehuanca, por decenas de policías que irrumpieron la sede provincial de Espinar en medio de protestas de pobladores, se produjo por una orden judicial luego de que las fuerzas de seguridad hallaron un vehículo oficial de la zona con decenas de "bombas caseras", según la fiscalía local.

"Somos responsables de mantener el orden y el orden se mantiene con firmeza y con las armas que nos da la Constitución del Estado", dijo el primer ministro Oscar Valdés, tras una reunión de su gabinete junto al presidente Ollanta Humala en Palacio de Gobierno.

Protesta en norte. El conflicto de Espinar se produce en momentos de iniciarse el jueves otra protesta convocada en el norte, en la región de Cajamarca, en rechazo al proyecto de oro y cobre Minas Conga, de la estadounidense Newmont, que con US$4.800 millones sería la mayor inversión minera en la historia de Perú.

El proyecto se encuentra paralizado desde noviembre del año pasado por la oposición de pobladores que temen que la mina contamine las aguas del lugar, mientras que Newmont afirma que el emprendimiento respeta las reglas ambientales.

La minería en Perú -el segundo productor mundial de cobre- es clave porque aporta el 60% de sus exportaciones.

La protesta sociales se producen en zonas muy pobres y paradójicamente en regiones donde Humala -quien tras dejar su discurso radical de izquierda se ha convertido en un promotor de las inversiones- tuvo una alta votación, como el Cusco.

"Circunstancias como la detención del alcalde de Espinar nos preocupa enormemente porque nuevamente la convocatoria al diálogo se ve entorpecida por estas detenciones", expresó la legisladora del Cusco por el partido oficialista Gana Perú, Veronika Mendoza.

Los conflictos, que suman casi 250 en todo el país, amenazan con frenar más proyectos en un sector que espera inversiones por US$53.000 millones en los próximos años.

Autores

Reuters