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Gobierno venezolano dice que el déficit de papel higiénico está "subsanándose"
Sábado, Mayo 25, 2013 - 12:24

La falta de papel higiénico es la cara más visible de una nueva etapa de escasez que atraviesa Venezuela, donde a menudo los consumidores deben recorrer varios supermercados para conseguir lo que buscan.

El Gobierno venezolano afirmó este viernes que la oferta de papel higiénico está normalizándose, luego de que su déficit obligara al país a importar la semana pasada 50 millones de rollos del producto.

"Ya hay síntomas de que este déficit que ocurrió en algún momento está subsanándose. Tenemos información de que ya el tema del suministro se está normalizando", dijo a los periodistas el viceministro de Industria, Carlos Farías.

Agregó que un "extra" de producción de papel higiénico ya comenzó a colocarse en las cadenas de distribución y en los comercios de venta al público.

El funcionario precisó que el ministro de Industria, Ricardo Menéndez, y su par de Comercio, Alejandro Fleming, mantuvieron un encuentro con ejecutivos de la empresa Papeles Venezolanos para verificar su funcionamiento.

La planta productora se encontraba "100% operativa", al igual que otras dos empresas distribuidoras, señaló.

"Estamos trabajando de la mano con ellos para ver qué problema logístico puede haber existido en el suministro de alguna materia prima", dijo Farías.

El Gobierno negó la semana pasada que hubiera una deficiencia en la producción de papel higiénico en Venezuela y atribuyó el faltante, que se convirtió rápidamente en tema de conversación de los venezolanos, a un exceso de demanda.

La falta de papel higiénico es la cara más visible de una nueva etapa de escasez que atraviesa Venezuela, donde a menudo los consumidores deben recorrer varios supermercados para conseguir lo que buscan.

El Gobierno atribuye la escasez a un plan de la oligarquía para derrocarlo, mientras sectores empresariales y también la oposición política la considera consecuencia de políticas como el control de precios, de cambios y otras que espantan a los inversionistas.

Autores

EFE