Pasar al contenido principal

ES / EN

GTLI detecta una mega reserva petrolera en el norte de Bolivia
Miércoles, Junio 11, 2014 - 17:35

Se estima que el Bloque Río Beni tiene 1.000 millones de barriles de crudo y en caso de que se confirmen las reservas detectadas, se podría eliminar la importación de diésel, que a la fecha le significa al Estado un gasto de unos US$1.000 millones al año.

Los primeros estudios técnicos realizados por GTLI en el Bloque Río Beni detectaron la existencia de un megacampo con una reserva de al menos 1.000 millones de barriles de crudo. La petrolera espera la aprobación legislativa de éste y otros tres contratos para encaminar las exploraciones.

El gerente general de Gas To Licuid International (GTLI), Luis Carlos Kinn, explicó en rueda de prensa que por las características del área y los estudios realizados, el campo petrolero podría estar al nivel de importantes yacimientos como en Perú, Colombia o Ecuador. “El contar con un contrato por el Órgano Legislativo nos permitirá iniciar con la excavación de pozos en el proyecto Río Beni”, afirmó.

El Bloque Río Beni abarca parte de los departamentos de Beni, Pando y La Paz. Tiene una extensión de un millón de hectáreas (400 parcelas). Si se confirma la información preliminar sobre el potencial de este campo, superaría con creces las expectativas que se tienen sobre el Bloque Lliquimuni, en el norte de La Paz, donde se estima que hay una reserva potencial de 50 millones de barriles de crudo.

Contratos. La petrolera tiene cuatro contratos firmados con Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), lo que le permitió efectuar estudios de prospección en los bloques Río Beni (La Paz, Beni, Pando), Itacaray (Chuquisaca), Cupesi y Almendro (ambos en Santa Cruz).

GTLI es una empresa que cuenta con capitales bolivianos y extranjeros. Hace ocho años empezó con los estudios técnicos en los cuatro bloques, donde se avizora reservas de petróleo y gas en volúmenes importantes. “Contamos con un apalancamiento financiero de $us 72 millones para iniciar los trabajos de exploración en su primera etapa (y) para ello se requiere que los contratos sean aprobados por la Asamblea Legislativa Plurinacional”, manifestó Kinn.

Señaló que el Bloque Itacaray es otro de los proyectos que promete un alentador futuro gasífero similar a la del campo Margarita, ubicado cerca de este yacimiento. “Este bloque, de confirmarse sus reservas, permitiría paliar la actual declinación de los megacampos de gas”, aseveró.

La Cámara de Diputados agendó para esta semana el tratamiento de los cuatro contratos petroleros firmados entre YPFB y GTLI. Los representantes de la empresa esperan que la misma sea aprobada de manera inmediata.

Kinn abriga las esperanzas que los convenios puedan ser aprobados en un corto tiempo a fin de garantizar las inversiones que requieren los estudios que se vienen realizando. Además de Río Beni e Itacaray, los bloques Cupesito y Almendro tienen una reserva estimada de 0,5 trillones de pies cúbicos (TCF) y 0,25 TCF.

Kinn dijo que en caso de que se confirmen las reservas detectadas en los cuatro bloques, se podría eliminar la importación de diésel, que a la fecha le significa al Estado un gasto de unos YS$1.000 millones al año. De encontrarse hidrocarburos en Río Beni e Itacaray, el ejecutivo de GTLI sostuvo que prevé invertir unos $us 1.000 millones en su desarrollo.

El origen de GTLI y sus socios

Sociedad

GTLI tenía como socio principal a la india Jindal. Sin embargo, dicho acuerdo fue disuelto después que ésta saliera del país, siendo reemplazada por la petrolera estadounidense Basin Holdings, que tiene como aliada a la rusa Integra Group.

Contrato

La petrolera estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) debe aprobar la modificación de los contratos a fin de que la Jindal pueda ser reemplazada por otro inversionista. La estatal tiene firmados 4 contratos con GTLI.

Autores

LaRazón.com