Las autoridades creen que de 200 a 330 barriles de crudo se han fugado cada día desde el 8 de noviembre hasta el martes de esta semana. En tanto, Chevron ha dicho que un total de entre 400 a 650 barriles de petróleo se derramaron al océano.
Río de Janeiro. Más de 2.600 barriles de petróleo podrían haberse derramado al Atlántico debido a una fuga en un campo marítimo de la estadounidense Chevron, informó este viernes la agencia de protección ambiental de Brasil.
Las autoridades creen que de 200 a 330 barriles de crudo se han fugado cada día desde el 8 de noviembre hasta el martes de esta semana, indicó Ibama, como se conoce a la agencia, en un comunicado en su sitio de internet.
Chevron ha dicho que un total de entre 400 a 650 barriles de petróleo se derramaron al océano. Las autoridades aún investigan la causa exacta de la fuga, que ha sido contenida casi en su totalidad, pero el comunicado de Ibama dijo que se debía a las operaciones de perforación.
Un portavoz de la Policía Federal de Brasil, que ha abierto una investigación en torno al derrame, dijo que la empresa "perforó unos 500 metros (1.640 pies) más lejos de lo que autorizaba su licencia". El funcionario habló a condición de guardar el anonimato porque no está autorizado a declarar sobre el asunto.
La fuga ocurrió en un sitio de perforación a unos 370 kilómetros (230 millas) al noreste de Río de Janeiro.
Carlos Minc, ministro ambiental del estado de Río, dijo anteriormente estar seguro de que la fuga era más grande de lo que Chevron calculaba y le exigió más transparencia a la compañía.
"No podemos banalizar esto", dijo el ministro a la cadena de televisión Globo. "Es muy grave y aún no conocemos todas las consecuencias. Este incidente es mucho más grande de lo que se ha dicho".
La mancha de petróleo, que se está alejando de la costa, aumentó a 18 kilómetros (11 millas), de acuerdo con el comunicado de Ibama. La mayor parte del crudo está concentrado alrededor de la plataforma de perforación y tiene aproximadamente un metro (tres pies) de espesor.
La vida marina en el área del derrame en el océano, a unos 370 kilómetros (230 millas) al noreste de Río de Janeiro, seguramente se verá afectada, dijo Minc, y señaló que en la zona hay presencia en este momento de ballenas durante su migración de norte a sur.
Chevron dijo que "los cálculos actuales colocan el volumen de la mancha de petróleo sobre la superficie de crudo en menos de 65 barriles".
La compañía tiene 18 buques trabajando por turnos para recolectar el petróleo de la superficie y monitorear la mancha.
El contratista de perforación del pozo es Transocean, propietario de la plataforma Deepwater Horizon que la petrolera BP rentaba cuando ocurrió el derrame del año pasado en el Golfo de México, el más grande en la historia de Estados Unidos.
Chevron informó que sus operaciones para taponear el pozo con cemento se están llevando a cabo.
Fabio Scliar, director de la división de asuntos ambientales de la Policía Federal, que investiga el caso, dijo que los responsables tendrán que rendir cuentas.
"No hay duda de que ocurrió un delito. El derrame proviene de la actividad de perforación. Lo que ahora me interesa es encontrar quién es el responsable", afirmó Scliar, según lo citó el periódico Folha de S. Paulo.