La tensión ha mantenido presión alcista sobre los precios globales del metal, que el lunes tocaban su mayor nivel desde mayo del 2015, en medio de la interrupción de los envíos desde dos de los mayores yacimientos del metal en el mundo, Escondida y Grasberg.
Antofagasta, Chile. La huelga de trabajadores de Escondida en Chile, el mayor yacimiento mundial de cobre, llegó el lunes a su quinto día sin que las partes muestren señales de acercamiento para lograr una pronta solución al conflicto, que ha obligado a la firma a declarar fuerza mayor en sus despachos.
Los operarios sindicalizados iniciaron el jueves la paralización de faenas e instalaron un campamento provisional en las afueras de la mina -controlada por BHP Billiton-, amenazando con extender la protesta por hasta dos meses.
El domingo, la firma incluso denunció actos violentos tras la supuesta irrupción el fin de semana de un grupo de 300 encapuchados desde el campamento del sindicato, lo que obligó a desalojar a personal subcontratista de las faenas.
"Toda la situación se mantiene, no ha habido ningún acercamiento. La compañía distrae la atención con este tipo de comunicados pero ya nos tiene acostumbrados", dijo el portavoz del sindicato, Carlos Allendes.
Mientras la empresa afirma que la última oferta que presentó recogía el resultado de las discusiones sostenidas desde diciembre, el gremio la acusa de intentar rebajar derechos obtenidos y diferenciar beneficios entre operarios nuevos y antiguos.
Las partes también mantienen diferencias por el número de trabajadores que debe facilitar el sindicato para mantener los servicios mínimos y evitar daños a los equipos e instalaciones.
La tensión ha mantenido presión alcista sobre los precios globales del metal, que el lunes tocaban su mayor nivel desde mayo del 2015, en medio de la interrupción de los envíos desde dos de los mayores yacimientos del metal en el mundo, Escondida y Grasberg.
La empresa, que ha afirmado que no producirá al menos en los primeros quince días de la huelga, ya declaró fuerza mayor en sus envíos, lo que la exonera de cumplir con contratos establecidos.
Operadores dicen que es difícil predecir hasta que punto la empresa podrá sostenerse sin producir.
"Se verá en el camino hasta dónde los trabajadores mantendrán una posición dura y hasta dónde el mercado se beneficiará o no de los precios del cobre y otros metales como para transformar el costo de la huelga en algo económicamente no tan malo", dijo un operador.
Escondida, que produjo poco más de un millón de toneladas el año pasado, está ubicada en el Desierto de Atacama a unos 3.100 metros sobre el nivel del mar y 170 kilómetros al sureste de la portuaria ciudad de Antofagasta.
BHP posee un 57,5% del yacimiento, en el que también participan Rio Tinto, JECO Corporation y JECO 2.
