Pasar al contenido principal

ES / EN

Indígenas paralizan construcción de hidroeléctrica brasileña Belo Monte
Jueves, Mayo 2, 2013 - 18:04

Los ocupantes piden que se paralicen los trabajos de construcción de Belo Monte hasta que finalicen todos los estudios sobre los efectos ambientales que la construcción de la central hidroeléctricas causará en el ecosistema de la Amazonía.

Unos 200 indígenas paralizaron este jueves la construcción de la central hidroeléctrica de Belo Monte, en la Amazonia brasileña, al ocupar parte de las obras.

Los ocupantes piden que se paralicen los trabajos de construcción de Belo Monte hasta que finalicen todos los estudios sobre los efectos ambientales que la construcción de la central hidroeléctricas causará en el ecosistema de la Amazonía, señaló la organización no gubernamental Xingú Vivo Para Siempre, participante en la protesta.

Por su parte, el consorcio responsable de las obras informó que la ocupación no afectó mucho el ritmo de los trabajos, debido a que mañana viernes es el día de pago de salarios, motivo por el cual la mayoría de los trabajadores se encuentra en las áreas administrativas y no en sus puestos de trabajo.

Desde el inicio de las obras en marzo de 2012, los trabajos de construcción de Belo Monte han sido interrumpidos en varias ocasiones por indígenas, ecologistas e incluso hasta por la justicia brasileña.

Belo Monte, que será la tercera mayor represa del mundo cuando entre en funcionamiento en 2015, es construida en un trecho del río Xingú en el municipio de Altamira, estado de Pará, en el norte de Brasil.

Los manifestantes, pertenecientes a las etnias munduruku, juruna, kayapó, xipaya, kuruaya, asurini, parakaná y arara, piden al gobierno la regulación de la convención 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), que obliga a los responsables por este tipo de obras a consultar previamente a la población afectada.

Los ocupantes aseguraron que permanecerán en Belo Monte por tiempo indeterminado o hasta que sus reivindicaciones sean atendidas.

La central hidroeléctrica podrá generar hasta 11.233 megavatios y es uno de los principales proyectos de Brasil para atender su futura demanda de energía.

Para su construcción serán inundados 516 kilómetros cuadrados de selva, que según grupos ecologistas, obligarán a desplazarse a unos 50.000 indígenas y campesinos que habitan en las riberas del Xingú y que causarán "daños irreparables" al ya delicado ecosistema amazónico.

Autores

Xinhua