Para el titular de investigación suiza de Kepler Capital Markets, Nestlé planea duplicar la capacidad de investigación que tiene en China y pronto tendrá la estructura de Investigación y Desarrollo más grande de todas las empresas alimenticias que hay en el país.

En 1874, tan solo ocho años después de su fundación, Nestlé SA comenzó a vender leche condensada en China. Desde entonces lanzó productos occidentales como Nescafé, helado y barritas KitKat. Aunque no se vendieron mal, la empresa suiza ahora le consulta a los chinos qué es lo que quieren realmente.

En el curso de los últimos tres años, Nestlé formó alianzas con tres productoras de alimentos y bebidas e instaló centros de investigación para mejorar los productos comestibles locales, como la leche de maní, salsas especiadas de Sichuan y congee (crema de arroz que se come en el desayuno).

A menudo, las competidoras modifican los productos para China como las papas fritas de PepsiCo Inc., a las que les agregaron saborizantes asiáticos, y las Oreo de Kraft Foods Inc., que ahora son de té verde. Nestlé va más allá con tres nuevas ofertas que le permitirán ganar consumidores en el interior del país.

“Nestlé tiene la visión de que todos los paladares para la comida son locales”, dijo Jon Cox, titular de investigación suiza de Kepler Capital Markets. “No se puede pensar que basta con modificar el producto un poquito para tener el mismo éxito en otros países”.

Para Cox, Nestlé planea duplicar la capacidad de investigación que tiene en China y pronto tendrá la estructura de Investigación y Desarrollo (I+D) más grande de todas las empresas alimenticias que hay en el país. China está decidida a ser el mercado número dos de la empresa suiza, después de Estados Unidos. En China, Nestlé espera que este año la facturación supere los 5.000 millones de francos suizos (US$5.300 millones), ya que el aumento en el nivel de vida estimula el consumo.

Leche de maní. Desde 2010, Nestlé forma parte de una empresa conjunta para embotellar agua con Yunnan Dashan Drinks Co. y compró capital accionario que le permite ser controlante de la productora de golosinas Hsu Fu Chi International y de Yinlu Foods Group, productora de congee y de una bebida de leche de maní.

A través de alianzas, Nestlé triplicó su dotación en China, que llegó a los 47.000 empleados. Con 31 plantas en todo el país, el 90% de los productos que vende en China se fabrican allí mismo.

Las acciones de la empresa alimenticia subieron en un 22% en los últimos tres años. Nestlé tiene planeado construir centros de I+D en las instalaciones de Hsu Fu Chi y Yinlu, donde los investigadores se centrarán en bebidas listas para el consumo y alimentos al horno.

La empresa suiza ya tiene un centro de investigación en Totole, que es un fabricante de caldos en Shanghái, del que Nestlé tiene el 80% de participación. Otra instalación en Pekín se centra en la tecnología para la nutrición y la alimentación.

Los laboratorios están situados “cerca del consumidor, cerca de las materias primas y cerca del marketing, y por ende, pueden responder mejor y más rápido a las necesidades del consumidor”, dijo Rebecca Lian, titular de I+D de Nestlé en China.