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OPEP prevé una leve bajada de la dependencia del petróleo para 2040
Jueves, Noviembre 6, 2014 - 09:56

Ese es el pronóstico a medio plazo que señala el informe "Previsiones Mundiales del Petróleo 2014".

Viena. El crecimiento económico mundial y el aumento del consumo en los países en desarrollo elevarán hasta 2040 en un 22% la demanda de petróleo, hasta 111 millones de barriles diarios, aunque la importancia del crudo en el mapa energético bajará en favor de otros combustibles fósiles.

Ese es el pronóstico a medio plazo que señala el informe "Previsiones Mundiales del Petróleo 2014", emitido en Viena por la OPEP, en el que se dibuja un mundo en el que los combustibles fósiles seguirán siendo la principal fuente energética.

"Son los combustibles fósiles los que seguirán teniendo el papel principal en la satisfacción de las necesidades energéticas del mundo en el futuro", asegura el documento de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP).

La OPEP argumenta esa necesidad indicando que hasta 2040 "la economía mundial duplica su tamaño, la población crece y la prosperidad se expande por todas partes".

Así, en 2040, y pese al lento pero constante progreso de las energías alternativas, el gas, el petróleo y el carbón seguirán cubriendo el 78% de las necesidades energéticas, apenas tres puntos porcentuales menos que ahora.

Eso sí, el petróleo irá reduciendo su importancia en favor del gas y dentro de un cuarto de siglo supondrá sólo el 24 por ciento de las fuentes de energía, frente al 32% actual.

Respecto al gas, el informe destaca cómo el aumento de los suministros gracias a la extracción de gas de esquisto o pizarra en Estados Unidos está cambiando el mapa energético.

Su bajo precio ha desplazado al carbón como fuente de producción energética en ese país y ha provocado que el carbón estadounidense esté siendo exportado a los mercados europeos.

Aunque el informe insiste en la complejidad y las incertidumbres que acompañan a cualquier previsión, los escenarios contemplados señalan que la economía mundial seguirá recuperándose gradualmente, pese a los problemas de ciertos países.

Así, la OPEP prevé que la economía crecerá hasta el año 2040 una media anual de entre un 3,1% y 3,9%.

Las economías de los países más ricos, sobre todo Estados Unidos, mantendrán su tendencia de recuperación.

También crecerán las economías emergentes, aunque entre ellas, la más importante, China, verá como se ralentizan el excepcional índice de crecimiento de las últimas décadas.

En Latinoamérica, la economía avanzará a una media de un 3,1% anual hasta 2040, señala el informe del grupo petrolero.

Las previsiones a medio plazo confirman la tendencia a la reducción de consumo de crudo en los países más ricos, que en 2040 quemarán un 17% menos de petróleo que actualmente.

En el resto del planeta, la demanda no dejará de crecer, sobre todo en China, que casi doblará en los próximos 24 años su demanda.

Para 2040, el gigante asiático consumirá ya más que Europa Occidental y los países ricos de Asia juntos.

En cuanto al precio, la OPEP asume que en 2015 su barril de referencia (que está cotizando por debajo de los 80 dólares) alcanzará un valor de 105 dólares/barril, aunque cinco años después habrá caído hasta 95.

A medio plazo, hasta el año 2040, la OPEP prevé una lenta evolución al alza hasta marcar un valor real, considerando la inflación, de 101,1 dólares por barril.

Por sectores, el transporte seguirá siendo la actividad que más crudo consuma a nivel global, aunque en los países ricos ese porcentaje baje significativamente, en favor de la industria.

En el capítulo de la oferta, la OPEP sigue siendo escéptica sobre si podrán mantenerse a largo plazo los actuales niveles de bombeo de petróleo de esquisto -que han colocado a Estados Unidos como principal productor del planeta- debido a problemas medioambientales y los costes de extracción.

La OPEP prevé que EEUU y Canadá eleven su ritmo de bombeo hasta 2030, fecha a partir de la cual se señala una caída de la producción.

Latinoamérica, sin contar Venezuela y Ecuador, casi duplicará hasta 2040 su capacidad de bombeo.

Mientras, la OPEP, a la que pertenecen esa dos naciones andinas, mantendrá una cuota en el mercado mundial del 40 por ciento.

En sus cálculos sobre la evolución del mercado petrolero, la OPEP analiza distintos elementos, desde el creciente uso del automóvil en los países en desarrollo, el impacto de las políticas contra el cambio climático o el uso de fuentes de energía alternativas.

Así, la OPEP prevé que el parque automotriz mundial crecerá hasta 2.100 millones de unidades

Este aumento será especialmente dramático en los países emergentes y, como no, en China, donde uno de cada tres ciudadanos tendrá coche en 2040, frente al actual uno de cada 18.

Respecto al cambio climático, la OPEP reconoce la relación entre emisión de gases de efecto invernadero y el calentamiento del planeta.

Por eso, asume que la aplicación de medidas para combatir esa situación añaden incertidumbre y podrían tener un fuerte impacto sobre el mapa energético mundial.

Autores

EFE