Pedro Pablo Kuczynski afirmó que el Gobierno no ha intervenido en la venta del proyecto de gasoducto de 1.134 kilómetros, a cargo de Odebrecht, "aunque luego tiene que aprobarlo".
Lima. El Gobierno de Perú debe aprobar la venta de la participación de la brasileña Odebrecht en un millonario proyecto de gasoducto en el país que sería adquirida por la estadounidense Sempra, dijo este domingo el presidente Pedro Pablo Kuczynski.
Kuczynski afirmó que el Gobierno no ha intervenido en la venta del proyecto de gasoducto de 1.134 kilómetros, "aunque luego tiene que aprobarlo".
Un consorcio liderado por Sempra está en negociaciones "exclusivas" para comprar la participación de Odebrecht en la operación del proyecto de gasoducto de US$5.000 millones que instalaría en el sur del país sudamericano.
"Básicamente Odebrecht tenía que vender (sus acciones) porque los bancos no querían apoyar la construcción hecha por ellos, hay otros socios como (la peruana) Graña y Montero y (la española) Enagás, que se quedan y entra Sempra", dijo el mandatario a periodistas en la región sureña de Tacna.
Kuczynski afirmó que junto con Sempra ingresará al proyecto de gasoducto "con una pequeña participación una constructora llamada Techint, que ya tiene mucha experiencia aquí".
Odebrecht, la mayor empresa de construcción e ingeniería de Latinoamérica que está envuelta en un escándalo de corrupción en Brasil, busca vender este proyecto en Perú y parte de sus activos en la región para recaudar efectivo y pagar deudas.
Una fuente que trabaja en Techint y que habló bajo condición de anonimato dijo el viernes que si las negociaciones tienen éxito, Sempra comprará un 50% de la participación de Odebrecht en la operación del gasoducto, y Tecpetrol -unidad del grupo de capital argentino Techint- adquirirá otro 5%.
Asimismo, Techint adquirirá la participación del 71% que tiene Odebrecht en una empresa responsable de la construcción del oleoducto, agregó la fuente.
La venta del proyecto de Odebrecht se produce en momentos en que un grupo de bancos negocia un préstamo de US$4.125 millones para financiar el ducto, considerado clave porque permitiría la creación de un polo petroquímico y surtiría de energía a grandes mineras que operan en el país andino.
Actualmente el proyecto del Gasoducto Sur Peruano, una concesión a 34 años para construir y operar el ducto, es administrado por Enagás SA, que tiene un 25% de participación en el emprendimiento. Graña y Montero SA tiene el 20% en el proyecto.
