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Primer juicio contra Toyota por aceleración comenzaría en 2 años
Sábado, Enero 15, 2011 - 10:02

El juez James Selna dijo a los abogados en una conferencia que espera que los llamados casos iniciales -aquellos que escogerá para que sirvan como guías sobre cómo procederá el resto del litigio- estén listos para juicio durante el primer trimestre del 2013.

Los Angeles. La primera de una decena de demandas presentadas contra Toyota Motor Corp en cortes federales de Estados Unidos por quejas de aceleración no intencionada no iría a juicio por al menos dos años, dijo este viernes el juez que supervisa los casos.

El juez James Selna dijo a los abogados en una conferencia que espera que los llamados casos iniciales -aquellos que escogerá para que sirvan como guías sobre cómo procederá el resto del litigio- estén listos para juicio durante el primer trimestre del 2013.

Más de 100 demandas separadas presentadas ante cortes federales en todo Estados Unidos contra la automotriz japonesa fueron consolidadas en abril para los procedimientos previos al juicio y asignadas a Selna en Santa Ana, California. Esa cifra ha crecido desde entonces a más de 200. Decenas más están pendientes en varias cortes estatales del país.

La corte de Selna se encuentra a poca distancia de la sede central de Toyota en Estados Unidos, ubicada en Torrance, California, al sur de Los Angeles.

Los casos de responsabilidad por productos defectuosos consisten en acciones de fraude a los consumidores, así como en demandas por muertes injustas y reclamos por lesiones personales, se derivan de quejas indicando que los vehículos y camiones de Toyota aceleraban inesperadamente fuera de control.

Los problemas de aceleración repentina no intencionada llevaron al retiro de más de 6,5 millones de vehículos Toyota en Estados Unidos para corregir dos problemas que según la automotriz provocaron el desperfecto: alfombras de piso mal ajustadas y pedales de aceleración que se atascaban.

La idea central de las demandas es que Toyota ignoró la evidencia de tales problemas -así como un supuesto error en sus sistemas de aceleración electrónica- durante la mayor parte de la última década y no instaló un sistema de anulación de frenado que pudiese evitar los accidentes.

Toyota ha negado tal falla electrónica. Las demandas ante Selna corresponden a la mayor parte de una cifra estimada de US$10.000 millones en posibles responsabilidades civiles que Toyota enfrenta, mientras lucha por reconstruir su manchada reputación de responsabilidad y seguridad después de los retiros de vehículos.

Los abogados demandantes esperan que los reclamos por pérdidas económicas, tales como un valor reducido de venta del vehículo, rodeen los US$40 millones para los clientes de Toyota en Estados Unidos si se confirma la condición de demanda colectiva a los casos de fraude a los consumidores como se pretende.

Los reguladores de seguridad federal investigan reportes señalando que un máximo de 89 muertes en accidentes de tránsito en Estados Unidos desde el 2000 podrían estar vinculadas a la aceleración no intencionada en Toyotas y la línea de lujo Lexus de la compañía.

Autores

Reuters