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¿Qué está buscando Exxon en Colombia?
Lunes, Diciembre 7, 2015 - 14:12

La empresa presentó una evaluación de impacto medioambiental de fracking en el bloque VMM-37 ante la autoridad del sector en Colombia.

Exxon Mobil Corp. ha solicitado un permiso medioambiental para explorar en busca de gas natural y petróleo de esquisto en Colombia mediante tecnología de fracturación hidráulica, en un intento de convertirse en la primera compañía perforadora en utilizar la controvertida técnica en el país andino.

La empresa presentó una evaluación de impacto medioambiental de fracking en el bloque VMM-37 ante la autoridad del sector en Colombia, la ANLA, dijo Exxon, que tiene sede en Irving, Texas, en una respuesta por correo electrónico el jueves. Si se completa un programa de trabajo acordado, Exxon adquirirá una participación de 70 por ciento en la operación no convencional, mientras que el 30 por ciento le corresponderá a Sintana Energy Inc., según una declaración de 2012.

La ANLA no recibió solicitudes de permisos para fracking, dijo el organismo en febrero en una respuesta por correo electrónico. No contestó un pedido de declaraciones de la semana pasada. La decisión de Exxon se da en un contexto de caída de los precios globales del petróleo que ha disuadido a otras compañías, entre ellas Ecopetrol SA, de buscar autorizaciones.

Colombia dio a conocer el año pasado normas que rigen la forma en que las empresas pueden explorar en busca de petróleo y gas natural por medio de fracturación hidráulica. Las regulaciones de la producción se publicarán en el primer trimestre de 2016, aunque si se concreta el fracking el año próximo es algo que dependerá de los precios del petróleo, según la Agencia Nacional de Hidrocarburos.

“El fracking es caro”, dijo el presidente de la ANH, Mauricio de la Mora, en una entrevista del 24 de noviembre. “Y, por supuesto, las compañías no destinarán dinero a algo que en este momento es caro”.

Para la mayor productora de petróleo de Colombia, Ecopetrol, a pesar de las posibilidades geológicas del país, los precios tienen que subir al menos por encima de los US$70 por barril para que el fracking tenga sentido en el plano económico, según el vicepresidente de exploración, Max Torres.

“Los Estados Unidos podrán tener la capacidad de adaptarse a precios bajos y mantener su industria de gas y petróleo de esquisto”, dijo Torres. “Pero para una industria nueva como la nuestra es muy difícil. Es algo para el futuro, cuando los precios mejoren”.

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ELESPECTADOR.COM